Roures, el magnate que se peleó con Barça, Real Madrid y PSG

Jaume Roures es uno de los hombres fuertes del fútbol español y europeo. La empresa de la que es fundador, propietario y presidente, Mediapro, ostenta los derechos audiovisuales de la Liga y es titular para España de los derechos de competiciones como la Champions League, la Europa League y el Mundial de 2022. La misma compañía es objeto de una investigación en Estados Unidos por la implicación en supuestos delitos de soborno, corrupción y organización criminal, según se desprende de diversos escritos de la Fiscalía de Nueva York con motivo del Barçagate. 

El poder del empresario catalán le ha llevado, de forma irremediable, a codearse con las grandes élites del fútbol mundial. Algo que le ha llevado a conseguir aliados y también a rodearse de muchos enemigos. Llegó a tener un trato cordial con entidades como el FC Barcelona, el Real Madrid o el París Saint-Germain, pero con el paso del tiempo las relaciones se han erosionado y Roures ha pasado de hacer negocios a enfrentarse con ellos.

Tormentosa relación con el Barça 

Uno de los grandes rivales del empresario catalán en el mundo del fútbol es el FC Barcelona. Las relaciones entre el club azulgrana y Mediapro eran buenas mientras Joan Laporta se sentaba en el palco del Camp Nou. De hecho, la compañía llegó a gestionar la televisión del club durante varios años. Roures, que fue agente de Johan Cruyff cuando entrenaba al Barça, mantenía y todavía conserva una relación cercana con el laportismo. Todo se torció con la llegada de Sandro Rosell a la presidencia de la entidad en 2010. Y eso que durante los primeros años parecía que las relaciones marchaban bien. 

Jaume Roures, propietario de Mediapro | REDES

Jaume Roures, propietario de Mediapro | REDES

El motivo de la ruptura se produjo ya con Bartomeu en la presidencia, aunque ya era vox populi que las relaciones entre Roures y Rosell se habían ido a pique. La decisión clave fue el traspaso de los derechos de televisión de Mediapro a Telefónica en 2015. El exdirectivo Manel Arroyo, accionista de Dorna, lideró aquella negociación que supuso al empresario catalán la pérdida de una de sus principales fuentes de ingresos. El empresario se lo tomó como una declaración de guerra. 

Líos judiciales 

Desde entonces, Roures y el Barça se han visto más en los juzgados que en los despachos. Mediapro reclamó 1,4 millones de euros al club por incumplimiento de contratos publicitarios. La entidad, en una contrademanda, solicitó 1,25 millones en concepto de contraprestaciones y liquidaciones. El Juzgado de Primera Instancia de Barcelona dio la razón al FC Barcelona y el empresario tuvo que pagar la mencionada cantidad.

Roures también se querelló contra el club, Sandro Rosell, Joan Carles Raventós y Robert Cama, estos dos últimos trabajadores de la entidad, por presunto espionaje entre 2009 y 2011. En enero, el juzgado de Instrucción de Barcelona, eximió al Barça de la causa. Con este caso aún abierto, el presidente de Mediapro advirtió recientemente que denunciará al FC Barcelona "por administración desleal y por atacarnos a mí y a Mediapro" en el marco del Barçagate. Roures, que a menudo presume de su condición de socio del Barça y parece tener cierta autoridad para opinar sobre la entidad azulgrana siempre que puede, es el mayor abanderado contra su propio club en los tribunales. 

Florentino Pérez 

La relación con el Real Madrid se rompió más tarde, hace aproximadamente un año. En abril de 2019, la entidad de Chamartín anunció que, a partir del mes de junio de ese año, la producción de la televisión del club pasaría a ser responsabilidad de un consorcio formado por una filial de Telefónica y otra de Mediaset. Hasta ese momento era Royal Media Internacional, filial de Mediapro, quien llevaba Real Madrid TV.

Florentino Pérez en un acto del Real Madrid / EFE

Florentino Pérez en un acto del Real Madrid / EFE

El distanciamiento entre la compañía catalana y el club blanco venía de lejos. Empezó allá por 2017, cuando Roures se mostró a favor de que los ciudadanos catalanes pudieran votar en un referéndum por la independencia. Mediapro, además, abrió un Centro de Prensa para seguir el 1 de octubre y produjo un documental sobre lo que ocurrió ese día. Todo ello no gustó nada en el Real Madrid, que ya arrastraba un cierto descontento con la gestión que un culé hacía de la televisión madridista.

El detonante de la ruptura entre el club blanco y Roures fueron unas declaraciones del empresario catalán en enero de 2019. El propietario de Mediapro, si bien señaló que "Florentino Pérez ha sido uno de los mejores presidentes en la historia del Real Madrid", lamentó que "ahora es demasiado forofo".

Al Khelaifi, de socio a enemigo 

Por lo que respecta al París Saint-Germain, todo empezó con el cierre de Bein Sports España en 2018. Mediapro compartía la propiedad del canal de televisión con Bein Media, empresa de Nasser Al-Khelaifi, presidente del club parisino. Pasaron de ser aliados a competir por las mismas competiciones en cuestión de meses. Ambos están siendo investigados por escándalos similares vinculados a sobornos por la adquisición de derechos televisivos de la FIFA. 

Jaume Roures y Nasser Al Khelaifi en una imagen de archivo donde también figuran Florentino Péres y Tatxo Benet / EFE

Jaume Roures y Nasser Al Khelaifi en una imagen de archivo / EFE

En 2019, cuando Mediapro perdió los derechos de emisión de la Champions en Francia ante Bein Sports, Roures pidió que las ofertas se hicieran públicas porque estaba "convencido" de "haber ganado". Más recientemente, criticó que Al-Khelaifi, como propietario de Bein Sports, suspendiera los pagos de los derechos televisivos hasta que se retomaran la Ligue 1 y la Ligue 2.

A lo largo de los años, Jaume Roures se ha enemistado con FC Barcelona, Real Madrid y París Saint-Germain, tres de los grandes del fútbol europeo. No parecen los mejores clubes con los que enfrentarse.