Los extraños motivos que justifican el retroceso del Barça en el límite salarial de la Liga

112 millones de euros. Es el número que el FC Barcelona ha visto reducido en su nuevo límite salarial de la Liga (351,2) para el curso 2025-26. Todo apuntaba a un posible aumento y las palabras de Javier Tebas, presidente de la competición nacional, lo corroboraban. Sin embargo, tras dos ejercicios consecutivos de incrementos, el Barça vuelve a recibir un duro golpe en referencia a sus cuentas. ¿Cuáles son los motivos? La respuesta viene acompañada de un mar de incógnitas y desconciertos.

Los PSL, la clave del asunto

Para entender el cambio radical en el parecer de la Liga hace falta comparar los datos de la temporada anterior. En verano de 2024, el organismo presidido por Javier Tebas adjudicó al FC Barcelona un baremo de 426,4 millones de euros y meses más tarde, en febrero de 2025, dicha cifra aumentó en 37 kilos hasta llegar al límite de 463,6 millones. Sin embargo, en abril del mismo año, la Liga penalizó a la entidad azulgrana.

El organismo nacional no computó los 100 millones que quería el Barça por los nuevos asientos VIP de la primera grada del Camp Nou, los denominados PSL de la zona Players Tribune. Crowe Global, nuevo auditor del FC Barcelona, no validó la venta de 475 butacas y a falta del visto bueno, dichos ingresos fueron restados de su límite salarial.

Nike y ticketing

De esta manera, la explicación más coherente para la caída del Barça en la escala salarial de la Liga atañe a la carpeta abierta con los PSL, pero dentro de la ecuación entran muchas más variables. La realidad es que si el propio presidente de la organización liguera expresó públicamente su despreocupación por las cuentas culés es por qué el FC Barcelona daba razones para augurar meses más tranquilos en lo financiero.

Los dos grandes argumentos para refutar la caída tan drástica del límite azulgrana son el nuevo acuerdo con Nike y los récords en ticketing. En primer lugar, dicho pacto con la empresa norteamericana ya ayudó al club culé a aumentar el baremo salarial en febrero de 2025. La renovación del contrato reportará a las arcas barcelonesas 1.700 millones de euros hasta 2038, lo que representa una media de 120 kilos por temporada.

No salen las cuentas

Aunque no se acerque a dichos números, los ingresos por ticketing del FC Barcelona el curso pasado fueron históricos. El presupuesto contaba con el regreso al nuevo Camp Nou a media temporada, pero el equipo azulgrana jugó todo el curso en el Estadi Olímpic Lluís Companys. Sin el santuario de Les Corts, la entidad catalana acabó facturando 44 millones más que en el ejercicio 2023-24.

De esta manera, tanto el acuerdo con Nike como las cifras de facturación por ticketing vaticinaban un aumento en el límite salarial. Asimismo, no se puede entender dicho declive de 112 millones, ya que sí que se podría argumentar una bajada de 100 kilos por los PSL, pero los buenos números de los dos factores anteriormente mencionados deberían cubrir o al menos suavizar el impacto de la no computación de la venta de los asientos VIP. Sin embargo, no ha sido así y existe una última razón esperpéntica que podría llegar a justificarlo.

El motivo secreto

En noviembre de 2023, la Liga introdujo cambios en su normativa de control económico para los clubes que están llevando a cabo reformas en sus estadios. Según estas modificaciones, los ingresos que dejen de percibir durante las obras no afectarán a su límite salarial, y este beneficio podrá aplicarse hasta dos temporadas. No obstante, el alivio tiene un tope: solo podrá representar un 5 % de la cifra de negocio del club, lo que en el caso del FC Barcelona equivaldría a unos 40 millones de euros.

Para el Barça, el reloj para usar dicha regulación ya ha acabado, ya que los clubes solo se pueden acoger a la normativa durante los dos primeros cursos independientemente de lo que duren las obras. Y aquí llega la trampa. El dinero que no le ha exigido la Liga al FC Barcelona durante esos dos años, lo tendrá que asumir durante las tres temporadas siguientes.

Es decir, que si el Barça, por ejemplo, se ha ahorrado 80 millones de euros del impacto del cambio de estadio de Camp Nou al Lluís Companys, significa que en los tres siguientes años, el club presidido por Laporta tendrá que pagar 26,7 kilos de más anualmente. Lo ha confirmado el propio Director Corporativo de la Liga, Javier Gómez: "El Barça tiene que afrontar una situación financiera ya de por sí complicada jugando con su estadio cerrado, lo que le cuesta un estimado de € 70 a € 80 millones al año".

De esta manera, se podría explicar dicha reducción de límite salarial en las cuentas azulgranas. Sin embargo, este punto es especulativo, ya que no existe ningún registro oficial de que el FC Barcelona haya hecho uso de dicha flexibilidad otorgado por la Liga.