La jugada oculta de Laporta para mantener el precio en las obras del Camp Nou: penalizaciones a cambio de sobrecostes

El FC Barcelona y Limak Construction pecaron de optimismo aventurado con el cálculo de los plazos sobre las obras del nuevo Camp Nou. La empresa turca ya roza los 10 meses de retraso respecto al retorno fijado para la celebración del 125 aniversario de la entidad. El efecto en cadena causado por la demora en la reapertura pone en peligro acuerdos de patrocinio como Spotify. Si el 90% de los activos patrocinables de las instalaciones no están construidos antes del 1 de julio de 2028, la multinacional tendrá el derecho de rescindir el contrato de los naming rights unilateralmente.

Motivos no faltan para que la junta directiva barcelonista, encabezada por Joan Laporta, ejecute la garantía que atañe a cada día de retraso sobre las obras. Ambas partes pactaron el 29 de noviembre de 2024, y han transcurrido 288 días desde entonces. Por lo tanto, la penalización correspondiente asciende a los 288 millones de euros. Sin embargo, la plana mayor se reserva dicho as bajo la manga para evitar sobrecostes en el Espai Barça.

Penalizaciones aplazadas

La vicepresidenta institucional del club, Elena Fort, ha asegurado en una entrevista con RAC1 que las sanciones por retrasos solo se valorarán "al final del contrato con Limak". Quedan numerosos capítulos por escribirse, pues apenas se comienzan a pagar los primeros intereses del préstamo astronómico de 1.475 millones. El club no renuncia a un derecho estipulado en el vínculo que une a ambas partes, pero está sujeto a interpretaciones.

Laporta desveló los matices en el Podcast del President, en octubre de 2024: "Si no se cumplen los plazos, están previstas unas penalizaciones que Limak tendría que pagar, porque está estipulado en el contrato. Pero lo cierto es que todo tiene su interpretación. Si no es imputable a ellos, nosotros somos una entidad seria y no les imputaremos penalizaciones que serían fruto de un oportunismo. Pero esto no se está produciendo, de momento estamos muy satisfechos con la constructora. Hasta nos alaba gente del sector por escoger esta constructora. Tiene una reputación importante. Nos están demostrando que son serios".

Demora sobre la demora

Finalmente, el retraso temido se produjo. No obstante, el FC Barcelona y la constructora otomana pactaron nuevas fechas de entrega, como fuentes de la institución barcelonista explicaron a Culemanía: "Todas las nuevas fechas han sido acordadas entre las partes implicadas, que son Limak, los inversores y el FC Barcelona. Si las partes implicadas acordamos una nueva fecha de entrega, no es aplicable directamente la correspondiente penalización, pero ello no implica que no puedan ser aplicadas en un futuro".

Las obras del nuevo Camp Nou, con el césped definitivo, en agosto de 2025 FCB

Desde entonces, Laporta y sus camaradas han considerado que los retrasos no pueden atribuirse a la constructora propiedad de Nihat Özdemir. No obstante, un nuevo error de cálculo degeneró en un spot publicitario precipitado sobre un retorno al templo culé para el Trofeo Joan Gamper que nunca llegó a ocurrir. Entonces, ¿de qué sirve el blindaje de una triple garantía legal para curarse en salud sobre las obras?

Triple garantía

Como ya informó Culemanía en primicia, el Barça se cubrió la espalda con tres cláusulas respecto a las obras. La primera consistió en un aval del 10% sobre el precio final pactado de la reforma en el Camp Nou. Como se estipuló un importe de 960 millones, Limak se comprometió a aportar un aval de 96 millones.

Limak coloca los asientos de la Grada d'Animació del nuevo Camp Nou REDES

En segundo lugar, el club azulgrana se aseguró una retención del 10% sobre cada certificación de obra. De cada 100 euros transferidos por el Barça a la constructora para costear las obras, la entidad catalana conserva 10. El dinero se desembolsará progresivamente, a medida que Limak avance con el proceso y se sufraguen tanto los materiales como la contratación de personal.

192 millones retenidos

El grueso de los pagos vendrá más adelante, tras consumar la reapertura del recinto con la primera y la segunda grada construidas. Como ya explicó este medio, la institución culé se ha basado en el modelo de la campana de Gauss para abonar el dinero. Concretamente, en la variante de la campana desplazada hacia la derecha.

Los tres modelos distintos de la campana de Gauss; la del Barça sería la negativa (izquierda)) ALAMY

De este modo, los desembolsos aumentarán gradualmente, sobre todo, cuando se aborde la construcción de la tercera gradería y la cubierta. El club retendrá el 10% de cada transferencia que realice, por lo que acumulará otros 96 millones a la finalización de las obras. Entre el aval inicial y la certificación de las obras, se habrán recaudado 192 millones de garantía al término de unas obras que todavía se alargarán hasta 2027 o 2028. 

Un millón por día

Tercero, y última garantía, la sanción por cada día de retraso desde el 29 de noviembre de 2024. En el último año, la junta de Laporta ha tenido que ingeniar soluciones imaginativas con Montjuïc para compensar los ingresos perdidos por el retorno fallido a Les Corts. Cierto es que las exigencias de los sindicatos vecinales sobre los horarios ralentizaron el ritmo de trabajo, así como las lluvias de octubre de 2024 o la falta de personal. Aun así, números en manos, han pasado 288 días. La misma cantidad de millones que el Barça tiene potestad de reclamar.

Joan Laporta y dirigentes de Limak visitan la obra del Camp Nou FCB

Precisamente, el coste de la remodelación del Camp Nou es la razón de peso que ahuyenta cualquier atisbo de penalización. En febrero de 2023, días después de conocerse la victoria de Limak en la adjudicación de las obras, las críticas ya se cernían sobre la junta directiva por contratar a una constructora sin un currículum reseñable en la industria del fútbol.

Los motivos de Laporta

Entre las razones aducidas por Laporta, el presidente esgrimió que se habían impuesto "garantías muy fuertes", es decir, las tres cláusulas mencionadas, y que Limak las había aceptado. Además, el holding turco también dio el visto bueno a "un precio máximo garantizado, no temerario": "Con relación al precio de la obra, era similar al resto de concursantes. La diferencia, sobre todo, estaba en los aspectos que no iban ligados a la obra". La promesa sobre la rapidez de las obras también decantó la balanza de la elección, pero a la postre ha chocado de bruces con la realidad.

Joan Laporta, Nihat Özdemir y los últimos avances en las obras del Camp Nou FCB Barcelona

El incumplimiento de las obras se aproxima al año, y la institución barcelonista ya ha reconocido que ha gastado "1.495 millones" de los 1.500 kilos concedidos por los inversores para la financiación del Espai Barça íntegro. El coste de las obras corre el riesgo de rebasar el capital inyectado. Por ello, la directiva se reserva la baza de las penalizaciones, a la vez que los responsables de la reforma no solicitan fondos adicionales.