El nuevo Camp Nou es la gran obsesión de Joan Laporta. Resueltas las inscripciones de Joan García y Marcus Rashford, el Barça espera registrar muy pronto a Szczesny y Gerard Martín, pero su presidente está mucho más ocupado, y preocupado, con el regreso del primer equipo al Camp Nou.
Laporta ha ganado una batalla. Ha conseguido que el Ayuntamiento de Barcelona acepte la reapertura del estadio por zonas. La Tribuna y el Gol Sur son los espacios más avanzados, pero las obras de reforma en la primera y la segunda grada todavía no están terminadas. Muchos más atrasos hay en el Lateral y el Gol Norte.
Los técnicos municipales
El Barça todavía no ha pedido la licencia de primera ocupación al Ayuntamiento de Barcelona. Laporta sabe que el actual alcalde, Jaume Collboni, es receptivo con sus demandas. Sin embargo, el club choca con la postura de los técnicos municipales y de los bomberos, muy estrictos con las medidas de seguridad de cualquier obra.
Jaume Collboni y Joan Laporta en un montaje sobre el Camp Nou
Técnicos del Ayuntamiento de Barcelona y los bomberos quieren que el Barça mejore los accesos al estadio. También, su evacuación. No quieren obstáculos que ralenticen ambas operaciones.
La Liga y la UEFA
El Barça, más allá de la licencia de primera ocupación, necesita también el visto bueno de la Liga y de la UEFA. Ambos organismos ya han visitado las obras y han comprobado los grandes avances del estadio en las últimas semanas.
Panorámica del nuevo Camp Nou
Boca de acceso al Camp Nou
El tiempo es el gran enemigo del Barça. La UEFA exige que todos los partidos de la liguilla se disputen en un mismo estadio. Ya sea el Camp Nou o Montjuïc. No admite cambios y el máximo organismo europeo todavía debe validar las obras del estadio barcelonista.
Laporta y Ceferin
En la UEFA recuerdan, por ejemplo, que el Camp Nou no dispone actualmente de una cubierta para los palcos y asientos Vip. La entidad que preside Aleksander Ceferin también es muy estricta con las medidas de seguridad --más complicas en un campo con obras-- y, sobre todo, no quiere gradas vacías, sobre todo las que están enfrente de la tribuna principal. Laporta, sin embargo, ha mejorado su sintonía con Ceferin y en el club son optimistas con la resolución de la UEFA.
Pedro Rocha, en el palco durante el España-Georgia de la Eurocopa con Aleksander Ceferin
El Barça, mientras, ha exhibido imágenes y vídeos con de la gran transformación del Camp Nou, de sus nuevos asientos y dependencias. Se han colocado nuevos lavabos y se han adecuado los pasillos.
Los asientos Vip
Laporta, por otra parte, tiene prisa por motivos económicos. El regreso al Camp Nou es el mejor argumento para que el auditor del club --Crowe-- valide la venta de los asientos Vip de la primera grada por 475 millones de euros, decisiva para que la entidad regrese a la norma del 1:1.
'Render' de los palcos VIP del nuevo Camp Nou
El máximo dirigente del Barça también tiene varios compromisos comerciales con grandes patrocinadores del club, a los que prometió que el primer equipo de fútbol regresaría esta temporada al Camp Nou.
Los retrasos de Limak
Laporta también presiona a Limak para que termine los dos anillos de palcos y asientos Vip que debe construir entre la primera y la segunda grada. Dicha obra, sin embargo, está en una fase muy inicial y la empresa turca difícilmente cumplirá con la exigencia de tenerlos acabados antes del 1 de enero de 2026. Y ese sí sería un contratiempo importante para el máximo dirigente, convencido de que ingresará 350 millones de euros anuales a medio plazo con la explotación del Camp Nou.