El Barça mantiene su idilio con la Liga. Los sufrimientos de Joan Laporta contrastan con la tranquilidad y el sentido común de Hansi Flick, el técnico que encontró la fórmula para reanimar al colectivo azulgrana. A la espera de noticias sobre las inscripciones pendientes, las cuentas del club, el Fair Play Financiero y el regreso al Camp Nou, la afición se agarra a un equipo con mucho fútbol y más deseo.
La isla de la calma
Son Moix no debía ser una plaza fácil para el Barça. El Mallorca, muy intenso con Jagoba Arraste, tiró el partido por la borda en un plis-plas. Se trastornó el equipo balear cuando Munuera Montero validó el gol de Ferran Torres. Las expulsiones de Morlanes y Muriqi dibujaron su impotencia y frustración ante un rival autoritario. En la isla de la calma, el campeón ganó por inercia, sin Szczesny ni Gerard Martín, y lejos todavía de la norma del 1:1.
Joan García tuvo un debut tranquilo en Mallorca
El día ya comenzó con buenas noticias. La Liga confirmó las inscripciones de Joan García y Marcus Rashford, los dos fichajes de la temporada, pero el Barça todavía no ha podido registrar a Szczesny y Gerard Martín, dos suplentes habituales para Flick. En su primera alineación de la temporada, el técnico alemán premió el buen momento de Éric García y Fermín, en detrimento de Koundé y Gavi, el día que y Lewandowski fue baja por lesión y reapareció Dani Olmo.
Las claves
El Barça inició el curso como terminó el anterior, adueñándose del balón, con Pedri como director de juego, con Lamine desequilibrando por la banda derecha y con Raphinha recogiendo el primer regalo del crack barcelonista para batir a Leo Román.
Raphinha marca el primer gol del Barça en Mallorca
En Son Moix, con un calor asfixiante y el marcador a favor, el Barça optó por contemporizar el juego ante un Mallorca con más nervio que pudo marcar en un remate de Muriqi bien resuelto por Joan García. La réplica, sin embargo, fue letal para el Mallorca, con Raillo en el suelo y sus compañeros deteniéndose, y Ferran marcando el segundo gol barcelonista.
Las expulsiones
Los problemas del Mallorca se agravaron antes con la expulsión de Morlanes. Y, desquiciado como estaba el equipo de Arraste, Muriqui también fue amonestado con tarjeta roja tras propinarle una patada en la cara a Joan García, a los 38 minutos. Perdió la cabeza el grupo balear y sus opciones de castigar al Barcelona.
Munuera Montero expulsa a Muriqi
La primera parte fue muy agitada y el Barça intentó que pasaran pocas cosas tras el descanso. Dani Olmo sustituyó a Fermín, y después irrumpieron Gavi, Jofre Torrents y Rashford. Los dos últimos, un joven de la cantera y un crack venido a menos en Inglaterra, debutaron con el primer equipo barcelonista.
El Barça se dosificó. Evitó que el Mallorca se metiera en el partido y cerró la jornada con el gol de Lamine Yamal en el tiempo de añadido, sentencia de una función muy plácida para el campeón de la Liga, tan autoritario en el campo como indescifrable en los despachos. El equipo, una vez más, sostiene a un club con muchos agujeros en sus cuentas. Laporta, curiosamente, parece más feliz que Flick, crítico con el partido de sus futbolistas en Son Moix.