Lamine Yamal, después de marcarle al Inter de Milán

Lamine Yamal, después de marcarle al Inter de Milán EFE

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El efecto Lamine Yamal, un 'Win-Win' económico y deportivo para el Barça: hacen cola para jugar con él

La explosión que ha representado el joven talento de Rocafonda servirá de ayuda para generar más ingresos y para ahorrar en costes salariales 

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Lamine Yamal es una bendición para el FC Barcelona. Se mire por donde se mire, la explosión del crack de Rocafonda abre puertas y genera beneficios al club que preside Joan Laporta. Obviamente, su boom supone un encarecimiento salarial, pero si el joven sigue con su progresión actual dentro y fuera de los terrenos de juego, acabará saliendo muy barato en todos los sentidos.

En estos momentos, y como firme aspirante al Balón de Oro, Lamine no solo representa un futbolista de primera clase mundial con un talento descomunal, sino que ya es una máquina de generar dinero para las arcas del club con la venta de camisetas. El magnetismo que desprende el delantero de 17 años --le falta justo un mes para los 18-- se traduce en forma de conexión con los fans, pero también es un imán para la captación de talentos por parte del Barça. Grandes jugadores hacen cola para poder jugar con Lamine Yamal y para formar parte de un equipo que aspira a entrar --todavía mucho más-- en la historia azulgrana y del fútbol en general. 

Nico Williams 

El último ejemplo es Nico Williams. Amigo íntimo de Lamine, el brillante extremo del Athletic Club ha dado un giro de timón radical a su estrategia del verano pasado. Entonces, el Barça le perseguía y Nico se hacía de rogar. Prefirió seguir un año más en Bilbao porque se jugaba la final de la Europa League en San Mamés y porque recibió muchas presiones, algunas familiares, para no cambiar de aires.

Nico Williams, atacante del Athletic Club, durante un entrenamiento

Nico Williams, atacante del Athletic Club, durante un entrenamiento EFE

También le aconsejaron que no se fiase del Barça por su delicada situación económica y se comprobó, con los problemas derivados de la inscripción de Dani Olmo, que esas voces no iban erradas. Sin embargo, Nico declinó al Barça y desde el club se lo advirtieron: hay trenes que no pasan dos veces en la vida. Ahora, todo ha cambiado. Es Nico quien corre detrás del tren del Barça, ya en marcha, y se ofrece, a la carrera, para que le dejen subir. Por este motivo, su agente ha solicitado audiencia con Deco y se han reunido este viernes. Un ofrecimiento en toda regla que alimentan sus amigos Lamine y Pedri a través de las redes sociales. 

Joan García

Nico se ha dado cuenta de que el Barça de Flick va muy en serio. Es un equipo aspirante a ganarlo todo. De hecho, lo ha logrado todo este curso salvo la Champions League. Eliminados injustamente en Milán --futbolísticamente los azulgranas fueron muy superiores, pero solo estuvieron por delante en seis minutos del global de la eliminatoria-- se proclamaron vencedores del triplete nacional (Supercopa, Copa y Liga) y tumbaron en cuatro ocasiones --todas-- al Real Madrid. El marcador global entre los eternos rivales reflejó un contundente 16-7 para los culés

Joan García, portero del RCD Espanyol, atrapa un balón

Joan García, portero del RCD Espanyol, atrapa un balón REDES

El boom Lamine, que es equiparable al efecto Flick, también ha captado la atención de Joan García. Formado en la cantera del Espanyol, ha negociado su próximo contrato con el Barça. No le importa tomar una decisión dura, que le pasará factura: fichar por el mayor enemigo perico. Prefiere quedarse en Barcelona cobrando 15 veces más y teniendo la posibilidad de jugar en este Barça de Lamine, pero también de Flick, y de Pedri, y de Raphinha, y de Cubarsí, y de tantos y tantos buenos jugadores que aspiran a hacer historia. 

Luis Díaz 

Tal es el impacto del efecto Lamine, que jugadores como Nico y Joan García están dispuestos a poner muchas facilidades para hacer realidad su fichaje por el Barça. Están dispuestos a no cobrar una gran ficha, conscientes de que el Barça asumirá el coste de sus respectivas cláusulas o traspasos.

Luis Díaz celebra su golazo en el Argentina-Colombia

Luis Díaz celebra su golazo en el Argentina-Colombia EFE

Pero no son los únicos. Luis Díaz, que éste sí que se ha declarado culé desde niño, va como loco por recalar en el Barça. El crack de Barrancas sueña con seguir los pasos de otro Luisito que triunfó con los reds antes de hacerlo como azulgrana, el gran Luis Suárez.

Marcus Rashford 

El extremo colombiano sabe que su salida será complicada porque el Liverpool no lo quiere dejar ir y tiene contrato hasta 2027, pero pondrá facilidades salariales y meterá presión, si hace falta, para que el club de Anfield rebaje su precio. En su caso, no es tanto por Lamine o Flick, sino por lo que simboliza el Barça para él. Pero el aliciente es especialmente atractivo teniendo en cuenta que estamos ante un Barça ganador. 

Marcus Rashford, objetivo del Barça, en un entrenamiento del Manchester United

Marcus Rashford, objetivo del Barça, en un entrenamiento del Manchester United MANUNITED

En la misma tesitura se encuentra Marcus Rashford. Asqueado tras una carrera muy irregular en el Manchester United y harto de la Premier, el crack inglés busca nuevos retos. Sabe que el Barça es una oportunidad única y la quiere tomar con todas sus fuerzas. Por este motivo se ha buscado un agente muy cerano al Barça, buen amigo del presidente Laporta, como es Pini Zahavi. Y, además, ha transmitido que pondrá todas las facilidades salariales para fichar. Es decir, que el potente extremo de Manchester se rebajará la elevada ficha que percibe en el United si ello le abre las puertas de una ciudad mágica como Barcelona.

Erling Haaland 

Incluso Erling Haaland, una de las grandes estrellas del momento, autor de 31 goles y cuatro asistencias este curso, valorado en 180 millones de euros por Transfermarkt --y superado por el propio Lamine hace escasos días--, se ha mostrado públicamente asombrado con lo que hace la joya de Rocafonda. En abril de este año compartió un vídeo diciendo que "este chico es increíble" tras ver su golazo al Inter en Montjuïc (3-3). Haaland es el principal objetivo de Laporta para el mercado de fichajes del Barça en verano de 2026, cuando se celebrarán elecciones a la presidencia, coincidiendo con el fin de contrato de Lewandowski. Lamine es un argumento más para poder acceder al fichaje del ariete noruego. 

Haaland mira a las gradas tras una victoria del Manchester City

Haaland mira a las gradas tras una victoria del Manchester City EFE

Tras unos años en que el Barça recibía calabazas de los grandes cracks y se tenía que conformar con estrellas veteranas --ojo, algunas de mucho nivel-- que aspiraban a un retiro dorado en la capital catalana --Aubameyang, Lewandowski, Marcos Alonso, Gundogan, Iñigo o Szczesny--, ahora se permite ir a por futbolistas que están en su plenitud. La frescura del equipo comandado por Flick, y sustentado en una base de jóvenes de la Masía, es un intangible muy atractivo para los jugadores de todo el mundo. Un imán para otros cracks de similar categoría y momento. Jugar junto a Lamine puede ser sinónimo de hacer historia. Un Win-Win porque se mejora la plantilla deportiva y, además, se puede ahorrar dinero en fichas.