La llegada del público al nuevo Camp Nou, más cerca: las obras de primera y segunda grada marcan el camino
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Joan Laporta no quita ojo al calendario. Tiene prisa para que el Barça regrese al Camp Nou. El equipo de Hansi Flick todavía espera noticias. Ya sabe que no será en diciembre ni enero. Se espera que sea en febrero, pero lo más probable es que sea en marzo, especialmente si el equipo queda entre los ocho mejores de la liguilla de la nueva Champions. Incluso hay quien sospecha que el Barça no volverá a su casa hasta la próxima temporada. Veremos.
Las obras de reforma del Camp Nou progresan adecuadamente. El problema es que no pueden trabajarse todas las horas deseadas en el estadio por las quejas de los vecinos. De momento, la tercera grada ni tan siquiera se insinúa, tan solo se puede ver su esqueleto metálico. Los operarios de Limak siguen trabajando en la reforma de la primera y la segunda grada.
El Barça ha cambiado algunas cosas de las primeras dos gradas. Ha eliminado pasillos, ha cambiado los lavabos, ha reforzado la estructura y ha comenzado la colocación de las nuevas butacas. Pero todavía queda mucho trabajo.
Nuevas butacas y lavabos
La segunda grada, construida en 1957, es patrimonio arquitectónico de la ciudad de Barcelona. No se puede alterar demasiado, pero sí se están ejecutando algunos pequeños trabajos para garantizar su conservación en buen estado. La primera está sufriendo un lavado de cara mucho más incisivo, aunque no se modificará el gran problema que arrastra desde los años 80, su escasa pendiente.
Laporta ya informó de que el regreso del Barça comportará algunas molestias. La capacidad provisional del Camp Nou será de unos 64.000 espectadores, que se ubicarán en las dos primeras gradas. Las de toda la vida, pero sometidas a un proceso exhaustivo de chapa y pintura.
Obras pendientes
El Barça, después, construirá dos anillos de palcos o asientos VIP y la tercera grada, que será simétrica, al contrario de lo que era la original. En la cubierta, semiabierta, se colocará un mirador de 360 grados y un skywalk. De ella penderá un videomarcador central con tres pantallas gigantes.
La reforma de las gradas contempla, también, la instalación de 69 ascensores y 78 escalares mecánicas y unas 3.000 plazas de aparcamiento. Entre las dos primeras gradas se creará un boulevard, que será la joya de la corona a nivel comercial, y se ampliará el museo del Barça.