Joan Laporta, presidente del Barça, no descarta la posibilidad de adelantar las elecciones de 2026 si el equipo de fútbol gana la Liga o la Champions y cierra algunos acuerdos económicos importantes como la renovación de Nike. En tal caso, y según los estatutos del club, el máximo dirigente debería dimitir y la convocatoria de las elecciones la tendría que hacer una junta gestora.

Laporta sacó pecho de su gestión hace una semana. Aseguró que la situación económica del club es mucho mejor que hace tres años y presumió de las cuatro victorias del Barça en la Liga. Paralelamente, la oposición mueve ficha e intensifica sus críticas al actual dirigente.

Los opositores

Joan Camprubí, Víctor Fort y Marc Ciria son, posiblemente, las voces más críticas con la gestión de Laporta, y el posible adelanto de las elecciones agita las redes sociales.

En pleno debate sobre el futuro del Barça, Toni Freixa, excandidato a la presidencia del club, ha salido en defensa de Laporta. Y, ahora, ha explicado que el máximo dirigente no puede convocar elecciones.

Los adelantos de Núñez

"Es importante tener muy presente que, en el Barça, ni el presidente ni la junta directiva pueden convocar elecciones anticipadamente. No está previsto en los estatutos", publicó Freixa en su cuenta de X, antes Twitter.

Toni Freixa en un acto de campaña / EFE

A Freixa le recordaron que Núñez, por ejemplo, solía avanzar las elecciones y recordó: "Con Nuñez había otros estatutos que sí lo permitían. Bartomeu no lo hizo. La junta dimitió y quien convocó las elecciones fue una comisión gestora (la primera vez presidida por Ramon Adell y la segunda vez por Carles Tusquets)".

La realidad es que Laporta solo podría avanzar las elecciones si dimite. Sería una junta gestora, como ocurrió hace tres años y medio, la que convocó a los socios del Barça a las urnas. Se trata, simplmente, de un formalismo.