Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, presumió de contar con el asesoramiento de Johan Cruyff en su primera etapa como máximo responsable del club. Y entre 2003 y 2010, Txiki Begiristain fue el único director deportivo. Mucho más agitado es su segundo ciclo. Sin los consejos de Cruyff, fallecido en 2016, Laporta ha contado con Jordi Cruyff y Mateu Alemany como responsables de la parcela deportiva hasta el fichaje de Deco, una pieza colocada por Jorge Mendes en la entidad. Hoy, el agente portugués gana poder en Barcelona. Es el gran aliado del dirigente bacelonista.
El Barça, con una situación económica muy delicada, se puso en manos de Mendes en el tramo final del mercado de verano. Laporta y el agente pactaron tres operaciones. Las llegadas de Joao Cancelo y Joao Félix, y la salida de Ansu Fati, tres futbolistas representados por Mendes. Igual que Lamine Yamal, Alejandro Balde, cuyos contratos serán prorrogados por el club. Mendes, asimismo, colocó a Nico González en el Oporto a cambio de 8,4 millones de euros.
Mendes también participó en la venta de Abde al Betis por 7,5 millones de euros. Y, hace un año, intervino en el fichaje de Raphinha. En los últimos meses, sin embargo, se le resistieron dos operaciones: el deseado fichaje de Bernardo Silva, imposible por las altas exigencias del Manchester City, y la contratación de Rubén Neves, rechazada reiteradamente por Xavi.
El Manchester United
Laporta, hoy, vive al día. Sin un plan estratégico. Hace 20 años, en cambio, tenía mucho más claros sus objetivos. Durante la campaña electoral ya se encomendó a Pini Zahavi para que el Manchester United anunciara en su página web que tenía un acuerdo con el abogado barcelonés para traspasar a David Beckham al Barça.
Beckham fichó, finalmente, por el Real Madrid, pero Laporta ya había conseguido el impacto mediático necesario para tumbar a Lluís Bassat en las elecciones de 2003.
Primera directiva
Laporta, con Josep Maria Bartomeu, Sandro Rosell, Ferran Soriano, Javier Faus y Marc Ingla en su equipo, vendió optimismo y gestión. Hoy, su junta es menos potente y mucho más presidencialista. Y el máximo dirigente ha confiado en agentes de su confianza los fichajes más importantes de cada temporada.
Hace un año, Laporta ambicionó el fichaje de Haaland, pero el delantero noruego era inasumible para el Barça por sus elevadas condiciones económicas. Frustrado, el presidente rescató a Zahavi para que convenciera a Lewandowski y el delantero polaco cambió Múnich por Barcelona. Un año después, Mendes ha sido el gran protagonista del mercado.
City y Atlético
Mendes ha negociado personalmente las cesiones de Joao Cancelo y Joao Félix con el Manchester City y el Atlético de Madrid, respectivamente, desbloqueando los recelos de ambas entidades.
El Manchester City quería una opción de compra obligataria superior a los 30 millones de euros para ceder a Joao Cancelo, pero el Barça rechazó dicha petición porque no hubiera podido cumplir con el Fair Play Financiero al computar dicha cláusula. En el caso de Joao Félix logró que el delantero aceptara un salario de 400.000 euros y que el jugador renovara dos años más su compromiso con el Atlético.