La Grada d'Animació vivió su gran año la pasada temporada. El curso que el Barça ganó la Liga con Xavi Hernández, técnico y jugadores agradecieron el apoyo recibido en todos los partidos. Con el traslado a Montjuïc, sin embargo, la directiva que lidera Joan Laporta ha reducido su protagonismo en un estadio que, curiosamente, es mucho más frío que el Camp Nou. El último recorte de las localidades reservadas a los cuatro grupos (Almogàvers, Nostra Ensenya, Front 532 y Supporters Barça) motivó una huelga de animación en el Gamper y la constatación de que su relación con los dirigentes del club es más tirante que buena.
El Barça, bajo la presidencia de Josep Maria Bartomeu, creó la Grada d'Animació en 2016. "Por recomendación y exigencia de la Liga", advierte un portavoz de las cuatro peñas. El club reservó la zona más baja del gol norte a los socios más jóvenes. En total, 1.245 plazas que nunca se han llenado por las actuales restricciones del club y de los Mossos.
Los socios de los grupos de animación, totalmente identificados por el Barça y los Mossos, deben someterse a estrictas medidas de seguridad. En el Camp Nou convivían los socios habituales y los esporádicos, que podian acceder al gol norte si otro abonado de dicha zona liberaba su entrada. Esta temporada no podrán presenciar los partidos del Barça desde la Grada d'Animació.
Los abonados del club
El traslado a Montjuïc ha comportado un descenso radical del número de abonados del Barça. De los 80.000 que tiene el club, solo 17.000 han retirado su carnet en el curso actual. Sorprende, sin embargo, que la directiva redujera hasta 591 las plazas destinadas a Almogàvers, Nostra Ensenya, Front 532 y Supporters Barça.
Los cuatro grupos de la Grada d'Animació tuvieron que recortar el número de abonados que tendrían una plaza en Montjuïc. No contaban, sin embargo, que el club les comunicara un nuevo recorte. Finalmente, solo dispondrán de 526 asientos.
El malestar de los grupos
"La lógica del club no es la misma que la del resto de abonados. En Montjuïc es más difícil animar al equipo y sorprende que reduzcan las localidades destinados a la Grada d'Animació", comenta Albert Yarza, portavoz de la Penya Almogàvers, fundada en 1989. "El club tiene un grave problema económico", añade.
Yarza, preocupado, recalca: "Algunos socios que ya habían pasado los filtros del club y de los Mossos no pueden acudir ahora al estadio". El portavoz de Almogàvers explica que contacto con el área social del club, que le dio pocas explicaciones del nuevo recorte.
Los turistas
Los cuatro grupos de la Grada aseguran que no tiene buena sintonía con la actual directiva. Y líderes históricos remarcan que "ningún presidente ha apoyado realmente la Grada d'Animació". "Se creó durante la presidencia de Bartomeu casi por imposición de la Liga. Xavi y los futbolistas, en cambio, sí han agradecido nuestra gestión en varias ocasiones", añade la misma fuente.
El malestar con Laporta sube de tono. Los aficionados más jóvenes lamentan que la actual directiva priorice "la venta de entradas a turistas" y piden una reflexión al club por la escasa respuesta de los abonados. Menos de uno de cada cuatro abonados retiraron sus carnets y Montjuïc puede presentar un aspecto "muy triste" en muchos partidos del Barça de esta temporada.