Victoriano Sánchez Arminio, excolegiado y expresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), ha muerto este domingo a los 80 años de edad. Desde 1993 hasta 2018 sufría cáncer de pulmón, enfermedad que ha sido la causante de su fallecimiento.
Durante su etapa como árbitro, dirigió encuentros en la máxima categoría del fútbol español durante trece campañas consecutivas, un total de 149 partidos hasta su retirada en 1989. A lo largo de su carrera fue designado para pitar tres finales de la Copa del Rey: en 1982, en 1986 y la de 1989, en el que fue su partido de despedida.
Al mando del Comité Técnico de Árbitros
Poco después, asumió la presidencia del CTA desde 1993 hasta 2018, cuando Carlos Velasco Carballo, y más tarde Luis Medina Cantalejo, le sustituyeron. También fue miembro del Comité de Designación, razón por la cuál estaba imputado en el Barçagate de Enríquez Negreira.
El cántabro, en cualquier caso, nunca tuvo conocimiento real de este tipo de actuaciones por parte del antiguo vicepresidente de los árbitros. De hecho, firmó con su DNI el escrito de todo el estamento arbitral criticando lo sucedido, y apoyando cualquier actuación desde la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y el propio CTA.
Primeras reacciones al fallecimiento
"Para nosotros es un shock tremendo, no lo esperábamos, era muy querido por todos. Era un hombre con mucho carácter, pero que nos cuidó como un padre, nos guiaba, nos echaba la bronca, pero una persona de entorno, no sé qué más cosas nos pueden pasar este año. Una persona que nos ha ayudado mucho a llegar donde estamos, descanse en paz, un abrazo y un beso a toda la familia", ha manifestado precisamente Medina Cantalejo en declaraciones concedidas a la Cadena SER. Una voz que recoge el sentir general en el colectivo arbitral.
El también excolegiado Iturralde González ha sido quien ha informado del fallecimiento de Sánchez Arminio en directo, a través del programa Carrusel Deportivo. “Fue el hombre que cambió el arbitraje. Cuando te tenía que decir algo te lo decía a la cara. A él nunca le podías engañar. Era como un padre, cuando te tenía que echar la bronca te la echaba. Es una pena, porque al final queda en duda toda una familia”, ha explicado. Desde Culemanía mandamos el pésame a su familia y seres queridos. Descanse en paz.