Joan Laporta, presidente del FC Barcelona, aseguró el lunes por la mañana, en declaraciones a TV3, que no piensa pedir responsabilidades al RCD Espanyol por la invasión de sus seguidores que puso en riesgo la seguridad de los futbolistas del Barça.
El máximo dirigente barcelonista, eufórico por la conquista de la Liga, celebró el título con los jugadores y el cuerpo técnico en el vestuario del RCDE Stadium.
La celebración
Laporta cantó, saltó y se abrazó con los futbolistas, mientras gritaba a favor del Barça. El presidente fue regado por los jugadores y tuvo que irse a su casa a cambiarse antes de continuar con las celebraciones.
Minutos antes, los jugadores del Barça y el staff técnico habían celebrado la Liga en el terreno de juego. Sin embargo, tuvieron que marcharse antes de tiempo tras comprobar que algunos ultras invadían el campo.
El túnel de vestuarios
Futbolistas como Sergio Busquets, Araujo y Marcos Alonso incluso se encararon con algunos radicales del Espanyol que habían llegado hasta el túnel de vestuarios.
Laporta, sin embargo, esquivó cualquier polémica. Nada que ver con su primera etapa como presidente del Barça en la que se encaró con los directivos del Espanyol en un derbi disputado en Montjuïc.