La fuga de talentos ejecutivos en el Barça de Laporta no para: Mateu Alemany, el último
La gestión presidencialista del máximo dirigente ha dejado muchas renuncias en la cúpula del club
4 mayo, 2023 01:08Joan Laporta es un presidente que presume de convertir la gestión del Barça en una empresa familiar. Su autoridad no se discute en el club y varios son los ejecutivos y directivos que ya han renunciado a sus funciones tras chocar con el presidente azulgrana. El último ha sido Mateu Alemany, pero las desavenencias internas comenzaron antes de que la actual junta directiva tomara el mando de la entidad.
La primera renuncia fue la de Jaume Giró, quien debía ser el vicepresidente económico del FC Barcelona. Participó en una prolongada campaña electoral que se tuvo que detener por el coronavirus y, una vez lograda la victoria electoral, a los seis días se retiró. El exconsejero de Economía y Hacienda de la Generalitat se desmarcó muy pronto de Laporta por discrepancias con su dirección poco participativa y su gestión de los avales.
La dimisión de Reverter
Más sonada todavía fue la renuncia de Ferrer Reverter, el CEO del Barça que fue presentado casi como un héroe debido a su exitosa gestión en Mediamarkt. Fue la persona elegida para reconducir la economía del club, pero su estricto plan chocó con el resultadismo del presidente azulgrana. Dimitió el 8 de febrero de 2022 y el mismo Laporta asumió sus funciones tras imputarle la marcha de Leo Messi.
La financiación del Espai Barça y el acuerdo de patrocinio con Spotify fueron los detonantes que terminaron con la complicidad entre Laporta y Reverter, de quien el presidente siempre ha dicho que se opuso a la renovación de Messi en 2021. En la memoria quedará su dura rueda de prensa contra la junta de Bartomeu cuando presentó los resultados del Forensic y una acción penal de la que poco se sabe.
Llopis, Elías, Guardiola, Llauradó...
El Espai Barça, el gran proyecto del club en el siglo XXI, también ha provocado otras tensiones y dimisiones como las de Ramón Ramírez, director del Espai Barça, y de Jordi Llauradó, directivo responsable del Espai Barça. A Llauradó le disgustó el acuerdo del club con Limak Construction para ejecutar las obras de remodelación del Camp Nou y pasó a ser el directivo vinculado a la fundación del club. A Ramírez lo fichó para su empresa.
Antes hubo algunas dimisiones más como las de Jaume Llopis y Enric Llopart, director digital del Barça. El primero, reputado economista, formaba parte de la comisión del Espai Barça y dimitió cuando Laporta anunció la salida de Messi. Llopis ha sido muy crítico con la gestión del presidente desde entonces. Posteriormente, José Elías, uno de los principales avalistas de la junta directiva, también abandonó su cargo como miembro de la comisión del Espai Barça porque sentía que no era de utilidad.
Otra dimisión sonada, aunque pasó muy desapercibida, fue la de Jaume Guardiola, presidente de la comisión económica del Barça. El reputado banquero, vinculado al Sabadell durante 20 años, dejó el Barça para convertirse en presidente del Cercle d'Economía de Barcelona. Guardiola no tuvo dudas en sus preferencias, pero sorprende que solo aguantase dos años analizando la gestión de Laporta. Prefirió buscar otro camino antes de poder salir salpicado. Mateu Alemany, director de fútbol, ha sido el último en desmarcarse de Laporta al chocar sus propuestas con los deseos del presidente.
El futuro de Jordi Cruyff
Laporta se rodea cada vez de personas más afines. De directivos y ejecutivos amigos, que asumen sus ideas. Y dentro de unas semanas esperará noticias de Jordi Cruyff, actual director deportivo, que tampoco tiene clara su continuidad en el Barça.
A la espera de Jordi Cruyff, Laporta deberá mover ficha. Antonio Cordón, exdirector deportivo del Betis, no convence al máximo dirigente, quien podría apostar por el exfutbolista Deco para relevar a Alemany.
Objetivo, la Liga
La gestión del Barça ha sufrido grandes renuncias en apenas dos años. Laporta tiene cada vez una mayor cuota de poder y quienes discrepan de sus ideas suelen tener los días contados en el club, inmerso en una crisis económica e institucional suavizada por su buena marcha en la Liga. A cinco jornadas para el final, el Barça está a dos puntos de ganar un título que se le resiste desde 2019.