Joan Laporta, presidente del Barça, tiene motivos para estar más tranquilo tras su última reunión con Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA. Hubo buena sintonía entre ambos y todo parece indicar que el máximo dirigente barcelonista pudo recibir garantías de que el club azulgrana no será sancionado este verano por sus pagos a José María Enríquez Negreira, exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, entre 2001 y 2018.
La UEFA ha abierto una investigación sobre el caso Negreira. Pero no quiere precipitarse ni sancionar al Barcelona antes de conocer la resolución judicial de dicho caso, según informa el diario Sport. De momento, Laporta ya ha dado explicaciones a los socios del Barça, a la Liga de Fútbol Profesional y a la UEFA.
El discurso de Laporta
Laporta siempre ha mantenido que el Barça es inocente, aunque no ha aclarado algunos asuntos ni ha asumido que el club se equivocara con su colaboración con Negreira. Javier Tebas, presidente de la Liga, recalcó el miércoles que las explicaciones del presidente del Barça "no fueron convincentes". Ceferin, en cambio, parece optar por una estrategia más conciliadora.
El máximo dirigente del Barça se reunió en Eslovenia con Ceferin, muy molesto con la postura del club azulgrana de apoyar la creación de la Superliga. En las últimas horas, curiosamente, Laporta ha matizado su discurso, abriendo una puerta de colaboración con la UEFA que ha sido muy bien recibida por su máxima autoridad.
Resolución judicial
La UEFA podría sancionar al Barça antes de que haya una resolución judicial, pero sabe que el club azulgrana pediría mucho dinero en concepto de daños y perjuicios. Y Ceferin no quiere correr riesgos. Tampoco quiere enfrentarse a uno de los grandes clubes europeos.
El Barça pagó 7,3 millones de euros a Enríquez Negreira, vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, entre 2001 y 2018. La Liga ya ha avisado de que no puede castigar al club azulgrana pero ha presionado a la UEFA para que tome cartas en el asunto.