Con el paso de los días, el caso Negreira empieza a ofrecernos más detalles del acuerdo entre el FC Barcelona y el que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros. Los informes especificados en ese pacto suponen el primer paso del club para justificar los pagos realizados al exárbitro, aunque la realidad es que todavía hay muchas incógnitas que deben despejarse. Una de ellas está vinculada a Joan Laporta, que en sus primeros años como mandatario de la entidad cuadriplicó el importe total hacia la empresa que facturaba por los servicios prestados.
Las grandes incógnitas del caso
En un principio, el actual presidente del FC Barcelona no estaba tan salpicado por la polémica, en especial porque la denuncia de la Fiscalía solo toma en cuenta a Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, antiguos dirigentes de la entidad. Pero eso no implica que Laporta no pueda verse muy perjudicado por la cantidad de información clave que todavía falta por conocer, en especial por sus primeros años a la cabeza del Barça y los pagos que realizó al hijo de José María Enríquez Negreira, Javier Enríquez Romero.
La primera incógnita es la explicada anteriormente: ¿por qué cuadriplicó los pagos? En la información filtrada se puede observar que los primeros pagos nacen de la efímera etapa presidencial de Joan Gaspart, específicamente en 2001. Pero a partir del siguiente año hubo un corte de grifo con la dimisión del que fuera dirigente del Barça. Esa situación se mantuvo en 2003-04 y 2004-05, los cuales representaron los dos años iniciales de la primera etapa presidencial de Laporta. Sin embargo, el dirigente decidió reactivar el servicio en la 2005-06 pagando 152.000 euros y terminó escalando hasta los 573.000 euros en la 2009-10. Una determinación bastante extraña y que merece ser respondida cuanto antes.
Otra incógnita que se desprende a partir de esto es: ¿por qué reactivó el servicio? Si bien es cierto que los informes tienen información detallada de las decisiones arbitrales de los partidos disputados del Barça y del perfil de los colegiados, la realidad es que es extraño que haya decidido continuar con el acuerdo con la empresa de Negreira, cuando se evidencia que se estaba pagando sobreprecio. Esto fue así hasta que en la 2018-19, la junta de Bartomeu decidió cancelar el pacto por completo.
El motivo detrás del acuerdo
También hay que destacar que será importante que la dirigencia de la entidad pueda explicar de manera detallada el motivo para pagar al exvicepresidente del CTA. Dentro del sumario que amplía la información del caso en cuestión se detalla lo siguiente: “De acuerdo con las manifestaciones de José María Enríquez Negreira a la Inspección, el Futbol Club Barcelona le pagaba por asegurarse la neutralidad en el comité arbitral”.
Del mismo modo, Negreira llegó a manifestar en el interrogatorio de la Agencia Tributaria que nunca les pagó a los árbitros con el dinero que recibió del club azulgrana. “Mi obligación era dar mi opinión sobre los partidos en cuanto al arbitraje y los jugadores. Asesoramiento técnico. Lo que el FC Barcelona quería era asegurarse de que no se tomaban decisiones en contra del club, que todo fuera neutral”, expresó en declaraciones de hace un par de años.
El Barça necesita un discurso
Si bien es cierto que Laporta ha aparecido en un par de ocasiones para hablar acerca de una caza de brujas contra el FC Barcelona, también lo es que no es suficiente para evitar que la imagen de la entidad mejore ante la opinión pública. Es necesario que pueda existir un discurso que permita revocar la acusación de la Fiscalía sobre el supuesto delito de corrupción deportiva y que permita tranquilizar a los demás organismos, como es el caso de la Liga y la Real Federación Española de Fútbol.
Es necesario que el dirigente del Barça aparezca para dar luz sobre esas dudas que existen y así obtener un panorama más esclarecedor del controversial caso. Es evidente que el proceso judicial podría tomar mucho tiempo en resolverse, pero lo mejor para el barcelonismo es que Laporta pueda dar un paso al frente y responder a las preguntas que se han planteado sobre la mesa.