Este viernes se ha confirmado la denuncia de la Fiscalía contra el FC Barcelona, Enríquez Negreria y otros cuatro ex altos cargos del club --Bartomeu, Rosell, Soler y Grau-- por los pagos hasta ahora injustificados de la entidad azulgrana al que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros desde 2001 a 2018. El caso ha llegado al juzgado de instrucción número 1 de Barcelona y se prevé un procedimiento largo hasta dilucidar si caben consecuencias penales contra los acusados. En caso de que así sea, la UEFA puede tomar medidas disciplinarias severas contra la entidad barcelonista como, por ejemplo, impedir la participación del Barça en la Champions.
Culemanía ha contactado con especialistas en derecho deportivo europeo que así lo han confirmado a este medio: "En caso de que el Barcelona haya tenido participación directa o indirecta en casos de sobornos o compras arbitrales, y así se considere probado, puede ser castigado con un año sin participar en competiciones europeas".
El artículo de la UEFA
Esta afirmación se sustenta en el artículo 4.02 del Reglamento de la UEFA Champions League --que en este caso es análogo al Reglamento de la Europa League o la Conference League--, donde queda patente que "si un club ha estado involucrado (...) en cualquier actividad destinada a organizar o influir en el resultado de un partido a nivel nacional o internacional, la UEFA declarará a dicho club inelegible para participar en la competición".
Este es el texto recogido en el artículo 4.02: "Si, sobre la base de todas las circunstancias fácticas y la información disponible para la UEFA, la UEFA concluye a su entera satisfacción que un club ha estado involucrado directa y/o indirectamente, desde la entrada en vigor del Artículo 50(3) de los Estatutos de la UEFA, es decir, el 27 de abril de 2007, en cualquier actividad destinada a organizar o influir en el resultado de un partido a nivel nacional o internacional, la UEFA declarará a dicho club inelegible para participar en la competición. Tal inelegibilidad es efectiva solo por una temporada de fútbol. Al tomar su decisión, la UEFA puede basarse en la decisión de un organismo deportivo nacional o internacional, un tribunal arbitral o un tribunal estatal, pero no está obligada a ello".
Además, el artículo 4.03 refuerza esta idea con la posibilidad de tomar otras medidas disciplinarias que, aunque no aparecen aquí reflejadas, podrían consistir, por ejemplo, en la expulsión del club de manera definitiva de la competición. Esto, en cualquier caso, ocurriría solo en casos considerados de extrema gravedad, aunque el caso de Negreira podría serlo: "Además de la medida administrativa de declarar a un club inelegible según lo dispuesto en el Párrafo 4.02 , los Órganos de Administración de Justicia de la UEFA pueden, si las circunstancias lo justifican, también tomar medidas disciplinarias de acuerdo con el Reglamento Disciplinario de la UEFA".
Un castigo contundente
Las fuentes conultadas por Culemanía explican que "este tipo de casos van para largo, pueden tardar hasta 10 años en resolverse". Existe un ejemplo similar que sucedió con el Fenerbahçe y se resolvió con su imposibilidad de participar un año en competiciones europeas cuando se hubo dictado una sentencia firme en la máxima instancia posible. En el caso del Barça, de momento hay que hacer la instrucción en el juzgado actual, posteriormente el juicio oral en la Audiencia Provincial o en la Audiencia Nacional y, en caso de recurso de apelación, el caso podría llegar hasta el Tribunal Supremo.
Al tratarse de un caso concerniente al ámbito nacional, es la RFEF quien tiene que tomar cartas en el asunto en primera instancia. El organismo que preside Luis Rubiales se personará como acusación particular en el procedimiento para llegar hasta el final. La UEFA en estos casos tarda más en entrar por no ser un caso vinculado a competiciones europeas, sino nacionales. Pero en caso de que finalmente se sancionen los hechos, el organismo que preside Aleksander Ceferin acabará castigando al Barça para paliar el daño reputacional que ello supone al fútbol español y europeo. La sanción básica que se contempla es un año sin poder pariticipar en Europa.