Desde hace semana y media, la polémica del Barçagate de Enríquez Negreira se está convirtiendo en el monotema de la actualidad azulgrana. Hace unos días, tras la presentación del nuevo sistema Kuppel de seguridad aérea anti-drones para el Camp Nou, Joan Laporta ya anunció que se está llevando a cabo una investigación interna en el FC Barcelona para llegar hasta el fondo de la cuestión.
El máximo mandatario del club aseguró que desea conocer al detalle cuál era exactamente la relación del Barça y sus anteriores presidentes con José María Enríquez Negreira y su hijo, Javier Enríquez Romero. Dicha investigación también deberá esclarecer si los pagos desvelados a la empresa del exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) pueden ser considerados como "corrupción deportiva o fraude deportivo".
El momento ideal para salir a escena
Sea como sea, desde el Barça se plantean ahora cuál es el mejor momento para ofrecer sus explicaciones ante la prensa. Laporta ya dejó claro que se realizaría en los próximos días una rueda de prensa extraordinaria para hablar detenidamente sobre el asunto.
Sin embargo, en el seno del club existen dos posturas sobre cómo lidiar con las nuevas informaciones que han ido apareciendo. Una de ellas, por ejemplo, es la que explica al detalle cómo se dieron los pagos del Barça a los Negreira, así como la reciente querella del árbitro Xavier Estrada Fernández.
Un clásico a la vista en el Bernabéu
Algunos directivos de la entidad culé piensan que lo mejor sería salir cuanto antes al paso de las informaciones para que la gente conozca la versión oficial del club, y así hablar la próxima semana ante los medios. Se da el caso, sin embargo, de que este jueves venidero hay un clásico contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu, con motivo de la ida de semifinales de la Copa del Rey.
Lo que menos quiere Laporta es que esta situación extradeportiva afecte a los jugadores y cuerpo técnico antes de una cita tan importante, con un título en juego. Más aún después de la eliminación europea frente al Manchester United, que podría haber dejado tocada anímicamente a la plantilla.
Pese al revuelo mediático del Barçagate de Negreira, desde el FC Barcelona no desean precipitarse sobre un tema cuanto menos delicado, y lo más probable es que esperen a tener más información antes de citarse ante los medios de comunicación en el Camp Nou. El dilema sobre la fecha concreta para ofrecer las explicaciones pertinentes, por tanto, sigue abierto.