Florentino Pérez echa un capote al Barça en el 'caso Neymar 2'

Hay veces en que los peores enemigos se convierten de repente en aliados necesarios. Como los distintos pueblos de Grecia que, según cuenta la leyenda, dejaron de guerrear entre ellos para conquistar Troya con la mayor flota jamás vista. Como en tantas otras ocasiones hemos presenciado a lo largo de la historia. Este martes, Florentino Pérez volvió a demostrar que desde hace meses es uno de los amigos más poderosos de Laporta y del Barça, en general.

En vez de rebatir a los enjuiciados del FC Barcelona que se sientan en el banquillo de la Audiencia de Barcelona por el Caso Neymar 2, el presidente del FC Barcelona se puso de su parte y transmitió un discurso muy parecido al de sus compañeros de acusación.

Porque mantiene la idea de seguir tendiendo puentes con el club azulgrana, al ir de la mano en la lucha por la creación de la Superliga Europea y en contra de las imposiciones de la UEFA. Y porque, sobre todo, le interesaba no decir nada que pueda perjudicarle en el juicio, siendo como es uno de los acusados por DIS y la Fiscalía, de igual manera que Sandro Rosell y el propio FC Barcelona.

Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, sentados detrás de Neymar Jr y su padre / EFE

Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, sentados detrás de Neymar Jr y su padre / EFE

Florentino, de parte del bando azulgrana

"Los jugadores van adónde quieren y Neymar quería ir al Barcelona", admitió el máximo mandatario merengue en la segunda jornada del litigio, asegurando además que no participó en ninguna de las negociaciones entre el Real Madrid y el Santos. Ni en 2011 ni en 2013, cuando fichó definitivamente por el Barça. Sí reconoce Florentino que lanzó una oferta por el brasileño en 2011, por valor de 45 millones de euros.

Pero que, en cualquier caso, el futbolista la rechazó porque quería jugar en el Camp Nou. Con las palabras del mandatario blanco, quedó patente que sigue la misma línea argumental que Andoni Zubizarreta, Antoni Rosich, Javier Faus y Sandro Rosell. Es lógico, puesto que le interesa no salir salpicado del embrollo, y hacer todo lo posible para que la acusación de DIS no progrese.

Una foto de archivo de Sandro Rosell, Neymar y Josep Maria Bartomeu / EFE

Una foto de archivo de Sandro Rosell, Neymar y Josep Maria Bartomeu / EFE

Minutos antes de la declaración de Florentino Pérez, había hablado el exdirector de fútbol del FC Barcelona, Raúl Sanllehí. "Nos dimos la mano un viernes, pero el lunes nos llamaron para decirnos que el Madrid había ofrecido cinco millones más. Eso no podíamos aceptarlo, porque ya habíamos cerrado el acuerdo", relató Sanllehí. A partir de ahí, el Barça decidió negociar directamente con el padre y representante del jugador. En noviembre de 2011, ambas partes sellaron un acuerdo para incorporar a Neymar en 2014 con una cláusula de penalización por incumplimiento de contrato de 40 millones de euros.

¿Por qué se adelantó un año el fichaje?

A todas las partes, sin embargo, les interesaba más que el fichaje se diese en verano de 2013. No sólo porque Tito Vilanova lo pidió en términos deportivos debido a la lesión de David Villa, sino porque el Santos quería cobrar algo de dinero por el traspaso, y no dejar que se marchase gratis al finalizar contrato.

Fue así como el Barça pagó al Santos 17,1 millones de euros por el fichaje del futbolista, además de otros 7,9 millones por la opción de compra de tres jóvenes promesas del equipo brasileño y otros 60 kilos por diversos conceptos a N&N Consultoria Esportiva, la empresa que gestiona el padre de Neymar. Unas cláusulas que según el Barça, y al contrario de lo que sostiene DIS, no iban ligadas al precio de la transferencia sino a aspectos de salario y primas para el jugador.