El Barça escucha ofertas: así está la pugna por la manga de la camiseta

En situaciones de máxima necesidad, todo euro es importante. "Hay que exprimir cada centavo", decía Homer Simpson en un capítulo de la famosa serie de dibujos animados. Ahora esa frase bien podría estar resonando en la cabeza de Joan Laporta, teniendo en cuenta que el presidente del FC Barcelona necesita activar palancas económicas antes de cerrar el balance económico 2021-22. Cuantas más, mejor.

En los últimos días ya aprobó una futura venta del 49% de Barça Licensing & Merchandising (BLM), con la que se espera obtener un mínimo de 200 millones de euros, aunque podrían ser más. También convocó una Asamblea Extraordinaria en la que se pedirá a los socios, a finales de este mes de junio, la autorización para ceder a uno o más inversores hasta el 25% de los ingresos para la explotación de los derechos de TV, relativos a la Liga de Fútbol Profesional.

Todo ello a la espera de cerrar un "acuerdo muy favorable" que servirá para renovar el vínculo con Nike, tal y como anunció el vicepresidente del área económica, Eduard Romeu; y ya con el logo de Spotify estampado en la parte frontal de todas las camisetas de la próxima temporada. Precisamente en este último apartado, el de la zamarra culé, hace falta seguir trabajando para encontrar sustituto a Beko en el espacio de la manga.

OneFootball ha ido perdiendo fuerza

Y ahí es donde se encajan las distintas posibilidades que maneja el club a día de hoy, sin descartar que lleguen ofertas aún más potentes en las semanas venideras. El Barça, sea quien sea el nuevo sponsor, espera sacar entre 15 y 20 millones de euros anuales por el patrocinio de la manga.

Beko luciendo en la manga izquierda de la primera camiseta del Barça / FCB

Beko luciendo en la manga izquierda de la primera camiseta / FC Barcelona

Hasta hace poco, la multinacional mejor situada era OneFootball, una plataforma de contenidos futbolísticos que engloba noticias, emisiones en directo de diversos torneos y estadísticas de alto nivel, entre muchos otros servicios disponibles para los amantes de este deporte. Dicha empresa tiene su sede central en Berlín, pero mantiene abiertas oficinas en grandes ciudades como Londres, Nueva York, Singapur, Ciudad de México y Sao Paulo.

El tirón de las criptomonedas y NFT

En los últimos días, sin embargo, OneFootball habría visto superada --algunas fuentes aseguran que doblada-- su propuesta. La compañía que estaría pujando tan fuerte en estos momentos por la manga de la camiseta del Barça es WhiteBIT, una plataforma de exchange de criptomonedas con origen en Ucrania, y aún algo desconocida en el sector del blockchain y el metaverso.

Se trata de un posible patrocinador del estilo de FTX o Binance, marcas que ya sonaron hace meses para el frontal de la elástica culé, de la misma forma que irrumpieron con fuerza otras compañías vinculadas al mundo de las NFT (Non Fungible Tokens) como Polkadot y Chiliz. Esta última, de hecho, ya está asociada con el FC Barcelona desde febrero de 2020, y buscaba dar un salto que hoy por hoy tiene muy complicado.

Pons (Barça) y Drefyus (Chiliz) posando en el Camp Nou / EFE

Pons (Barça) y Dreyfus (Chiliz) posando en el Camp Nou / EFE

Las últimas informaciones señalan que WhiteBIT se encuentra ahora en la pole-position tras haber realizado una gran oferta en los últimos días, obteniendo así el visto bueno del departamento de marca del club para entablar unas negociaciones que sirvan para cerrar un acuerdo definitivo. Fuentes internas del FC Barcelona, consultadas por Culemanía, no han querido ofrecer demasiados detalles y han hecho hincapié en que no se hablará de futuros acuerdos hasta que estén cerrados y sean oficiales a todos los niveles.

WhiteBIT no sólo quiere la manga

El caso es que WhiteBIT pretente superar a OneFootball y al resto de candidatos para hacerse con la manga de la camiseta, relevando así a Beko y dejando en la estacada a otro patrocinador turco que se postulaba hace unos meses para ocupar ese espacio: Turkish Airlines. WhiteBIT, además, aspira a conquistar otros espacios menores como la espalda de la camiseta de entrenamiento, y algún hueco en las equipaciones de las secciones profesionales.

El Barça, en definitiva, podría acabar arañando algo más de los 15-20 millones que esperaba ingresar anualmente por este concepto. Una palanca más que, combinada con las otras, se convertirá en una bombona de oxígeno justo en el momento más necesario para las arcas del club.