La Superliga pierde apoyos en el mercado audiovisual un año después de su polémico anuncio
El proyecto de Florentino Pérez está en punto muerto y no tiene el respaldo suficiente de las televisiones
19 abril, 2022 14:59Nunca un primer cumpleaños había sido tan amargo. Por estas fechas se cumple un año desde que se anunció por vez primera la Superliga Europea, el proyecto que decidió impulsar Florentino Pérez y que rápidamente unió a los grandes clubes de Europa, pero que a día de hoy sólo tiene como defensores a Real Madrid, FC Barcelona y Juventus. De la docena de equipos que en un principio se sumaron a la iniciativa, anunciada con polémica en El Chiringuito de Josep Pedrerol, hace meses que únicamente quedan tres.
Atlético de Madrid, Manchester United, Manchester City, Chelsea, Liverpool, Tottenham, Arsenal, Inter y AC Milan se fugaron del proyecto apenas 48 horas después de que se pusiera en marcha de forma público, debido en gran medida al revuelo mediático y social que se produjo. A día de hoy, ninguno de esos nueve clubes tiene previsto volver a menos que se cambien las condiciones y se estudie una alternativa más inclusiva.
La Superliga Europea no se ha recuperado aún de la estocada mortal que recibió entonces, y la situación va camino de empeorar aún más para los intereses de Florentino Pérez. Y es que, en el caso de azulgranas y bianconeri, sus malas situaciones económicas podrían hacer que también se desmarquen definitivamente. La Juventus perdió 300 millones de euros en los dos primeros cursos afectados por la pandemia de coronavirus, y en el primer semestre de esta temporada 2021-22 ya sufría un agujero adicional de 119 'kilos'.
El FC Barcelona, por su parte, acumula un total de 578 millones de euros en pérdidas en los dos últimos años, y desde la llegada de Laporta está llevando a cabo una política de saneamiento y la inclusión de nuevos patrocinadores que puedan revitalizar la economía del club. Sabiendo esto, es más fácil entender los últimos acercamientos entre el Barça y CVC Partners para renegociar las condiciones de la Liga y lograr una nueva inyección de liquidez, que reportaría unos 270 millones de euros a la entidad.
Buenas noticias para los detractores
Los impulsores de la Superliga prometieron "aportar estabilidad financiera a toda la familia del fútbol europeo", pero el devenir de los últimos doce meses ha servido de argumento para los detractores del proyecto, con el presidente de la UEFA a la cabeza. Se ha confirmado que existían vías alternativas "a un proyecto que fue diseñado para romper unilateralmente la actual pirámide competitiva, basada en méritos competitivos", según se advirtió desde el organismo europeo que preside Aleksander Ceferin.
Y es que, además de los acuerdos de la Liga y la Ligue 1 de Francia con CVC Partners, la UEFA ha conseguido un acuerdo de financiación de 7.000 millones de euros con Citibank, aportando de esta forma la liquidez que muchos clubes necesitaban tras la pandemia para no desaparecer del mapa. En Inglaterra, además, ya han tomado medidas para que el Big Six no decida dar marcha atrás y apueste de nuevo por la Superliga. La BBC informó recientemente que, si no cumplen, sufrirían una deducción de 30 puntos en la clasificación y una sanción de nada menos que 25 millones de libras cada uno.
En Francia, paralelamente, el mayor representante futbolístico de dicho país, el PSG, está totalmente en contra de la Superliga. Su presidente, Nasser Al-Khelaifi, ha aprovechado los últimos meses para acercarse a la cúpula de la UEFA y lograr acuerdos favorables para su equipo, especialmente en asuntos referidos al Financial Fair-Play.
Sube el valor de los derechos audiovisuales
Por último, está la traba del mercado audiovisual del fútbol europeo, donde la Superliga tan sólo recibe actualmente el apoyo del 50%. Mientras tanto, ve cómo competiciones como la Liga y la Premier League están incrementando sus respectivos valores en derechos audiovisuales. LaLiga ha llegado a un acuerdo con ESPN a cambio de 175 millones de dólares hasta 2029, el doble del contrato que tenía firmado anteriormente. Y la liga inglesa, por su parte, está doblando también sus ingresos con CBNC gracias a un nuevo contrato a largo plazo. En resumidas cuentas, todo son palos en las ruedas para una Superliga cada vez más difícil de fructificar.