El mundo de las agencias de representación es complejo, y sobre todo en la élite del deporte. El equilibrio entre buscar el beneficio económico propio y la mejor opción para el deportista comporta una delgada línea roja que a veces se sobrepasa, poniendo en riesgo la carrera de los representados. Algo, por ejemplo, que queda ejemplificado actualmente con la voluntad de Moussa Sissoko, agente de Ousmane Dembelé, de cobrar sí o sí una prima de renovación para favorecer la continuidad del jugador francés en el FC Barcelona.
La mayoría de veces, en cualquier caso, sí se obra conforme a una ética profesional que lleva a escoger la alternativa más atractiva para la evolución del jugador, que es quien debe salir ganando al fin y al cabo. En el club azulgrana, son varios los agentes y grupos de representación que se reparten el pastel de los futbolistas del primer equipo.
Los más poderosos entre la plantilla
En número de jugadores representados, podría decirse que las cuatro agencias que ostentan más poder en el Barça son las siguientes: AC TALENT de Arturo Canales (Xavi, Piqué, Umtiti y Riqui Puig), TACTIC GROUP de Josep Maria Orobitg (Busquets, Sergi Roberto, Mingueza, Mika Mármol y Guillem Jaime), GESTIFUTE de Jorge Mendes (Ansu Fati, Nico, Adama y Balde) y FOOTALENT (Gavi, Éric García y Arnau Tenas) que dirigen Iván de la Peña y Ramón Sostres, con Carles Puyol participando entre bambalinas. Luego están HCM SPORTS MANAGEMENT, la agencia que representa a Frenkie de Jong y Braithwaite; y LEADERBROCK, que hace lo propio con Ferran Torres y Pedri.
El resto de jugadores fundamentan sus carreras en otros grupos o representantes que no se encuentran entre los más demandados. Desde BERTOLUCCI SPORTS (Neto) hasta ICM STELLAR SPORTS (Sergiño Dest), pasando por ROOF (Ter Stegen), EXCELLENCE SPORT (Ronald Araujo) o el TEAM DEPAY, naturalmente, de Memphis y su entorno más directo. Todas ellas tienen a su disposición un trocito del pastel azulgrana, por poco que sea, y buscan cerrar los mejores contratos tanto para los intereses de sus representados como para los suyos propios.
De La Peña gana terreno a Orobitg
El poder de los representantes es variable y depende de muchos factores. En el seno de la entidad culé, se prevé que en pocos años Josep Maria Orobitg pierda mucho peso dada la edad y situación de sus clientes, cuyo futuro no está nada claro. A Busquets le quedan uno o dos años a buen nivel, mientras que tanto Mingueza como Sergi Roberto podrían hacer las maletas este verano. Al mismo tiempo, están ganando presencia en el club otros agentes como Iván de la Peña y Ramon Sostres, debido a la gran proyección de los futbolistas para quienes trabajan.
FOOTALENT, de hecho, ha generado unos ingresos de 939.600 euros en 2020, el último ejercicio declarado. En años anteriores facturó 475.000 euros (2018) y 2,265 millones (2019, el mejor año). Su mayor accionista es Massivert (un 45% del porcentaje total), por un 10% de Tax Fides SLP y un 45% restante de otros accionistas, que no aparecen en el Boletín Oficial del Registro Mercantil. Según ha podido saber Culemanía, la ecuación es fácil: Puyol y De la Peña tienen el mismo porcentaje de poder, mientras que Ramon Sostres se queda el restante 10% mediante su sociedad Tax Fides.
Mino Raiola puede entrar a lo grande
Otro que podría entrar de lleno en el negocio culé es Mino Raiola. Representa a un Erling Haaland (Borussia Dortmund) que hoy por hoy es el gran deseo de Laporta, Alemany y compañía para reforzar la punta de ataque del FC Barcelona. El club azulgrana no quiere volverse loco, pero si existe una oportunidad de fichar al noruego, no dudará en agotarla. La hipotética llegada de Haaland, paralelamente, abre la puerta a la posibilidad de que lleguen al primer equipo otros jugadores representados por el díscolo agente italiano: Noussair Mazraoui (Ajax), el favorito.
Valero Rivera domina en el balonmano
Si echamos una ojeada al equipo de balonmano, veremos que hay un representante que destaca por encima del resto. Se trata de Valero Rivera, el encargado de gestionar las carreras deportivas de tres componentes de la plantilla culé: el portero Gonzalo Pérez de Vargas, el extremo derecho Aleix Gómez y el extremo izquierdo Aitor Ariño. Un agente, por tanto, respetado y con un gran poder de influencia en el entorno azulgrana. El exentrenador tuvo mucha incidencia en la marcha de Xavi Pascual y la posterior contratación del actual técnico, Carlos Ortega.