¿Cómo conseguirá Laporta unos ingresos de 765 millones de euros?

El FC Barcelona ya tiene nuevo presupuesto para la próxima temporada. Lo aprobó este jueves la junta directiva en reunión ordinaria de sus miembros, aunque extrañamente no se ofrecieron más datos cómo los ingresos y gastos totales del curso 2020-21, del que únicamente se hizo oficial una cifra que ya se había avanzado con anterioridad: los 481 millones de pérdidas. Para contrarrestar este negativo dato, el Barça de Joan Laporta anunció el primer presupuesto oficial de su mandato: 765 millones de ingresos de explotación. La gran pregunta es: ¿Cómo los conseguirán? 

El vicepresidente económico del club, Eduard Romeu, ha dado algunas claves este jueves en una entrevista para Rac1. El también director general de Audax Renovables asegura que van a "doblar los ingresos por patrocinios" de forma que "vamos a ser competitivos en el próximo mercado de fichajes". Optimismo del vicepresidente pese a la raquítica situación que atraviesa el club y que se fundamenta en cinco ámbitos de atuación, según ha podido saber Culemanía: recuperar los ingresos por ticketing, revitalizar la facturación por patrocinios, renegociar los derechos televisivos sin someterse a las hipotecas que propone la Liga, vender por separado el Barça Corporate --ya han creado una sociedad para explotar Barça Studios, imitando la fórmula utilizada para Barça Licensing & Merchandising, el otro gran foco de ingresos potenciales-- y vender futbolistas en el mercado de fichajes.  

Eduard Romeu, vicepresidente económico del Barça / FCB

Eduard Romeu, vicepresidente económico del Barça / FCB 

Los tres ejecutivos clave: Reverter, Barbany y Alemany

Laporta se ha rodeado de reputados ejecutivos para conseguir estos objetivos económicos. Su mano derecha es el director general del club, Ferran Reverter, exCEO de Mediamarket encargado de liderar la gestión de la entidad encaminada a reducir gastos y revitalizar los ingresos. Reverter ha sido señalado como el principal responsable de la marcha de Leo Messi dentro de la estructura de Laporta --donde reparten culpas entre Bartomeu, Tebas y Koeman, al que meten en todos los fregaos-- y también tiene un papel clave en las rebajas de salario de los cuatro capitanes. Piqué, Busquets y Jordi Alba ya la han firmado. Falta hacer oficial la de Sergi Roberto, que renovará su contrato previsiblemente hasta 2024 con una reducción salarial de los fijos y, sobre todo, los variables. 

En cuestión de patrocinios, las figuras clave están representadas por el vicepresidente Juli Guiu y por el jefe de ingresos, Àlex Barbany. Este último es el principal responsable de potenciar Barça Studios para comercializarlo en la línea que en su día expuso el exdirectivo Dídac Lee, apoyado en otros altos cargos como Guillem Graell o Enric Llopart. Pero la vía más importante de crecimiento pasa por encontrar un nuevo sponsor principal para la camiseta --Rakuten saldrá después de haber pasado de pagar 55 millones anuales a los 35 actuales-- y renegociar el acuerdo con Nike sabiendo que hay otras posibilidades en la recámara, como Puma. El equipo de Laporta también busca nuevos patrocinadores y trata de cuidar a los que ya tiene, como es el caso de Damm, cuyas relaciones se enfriaron cuando el ahora presidente hizo su campaña electoral en la casa de la competencia: la Fàbrica Moritz. 

Riqui Puig y Sergi Roberto en el anuncio de la nueva camiseta de Nike para la Champions / FC Barcelona

Riqui Puig y Sergi Roberto en el anuncio de la nueva camiseta de Nike para la Champions / FC Barcelona

El tercer ejecutivo decisivo en esta tarea de conseguir dinero no es otro que Mateu Alemany. Cerró con la ayuda del secretario técnico, Ramon Planes, un mercado de fichajes magistral en términos económicos: 88,1 millones de ingresos por 16,5 millones de inversión que dejan unos beneficios en traspasos de 71,6 millones de euros. Contando los variables aplicados a las diferentes operaciones, especialmente los 40 millones de Griezmann, el cómputo de ingresos por traspasos podría ascender a más de 135 millones. El coste que tiene esta acción representa una plantilla claramente debilitada en lo deportivo para el señalado Ronald Koeman. 

Evolución de los ingresos

Si finalmente se cumple la previsión de los 765 kilos, optimista después del pesimismo que se lleva vendiendo todo el verano y que alcanza su colofón en esa infladas pérdidas de 481 millones, el Barça seguirá estando muy lejos de los ingresos que tenía antes de la pandemia. Hay que recordar que la junta de Bartomeu había previsto superar los 1.000 millones de euros en la campaña 2019-20. No se logró debido a la irrupción del virus en nuestras vidas. Sin embargo, el curso inmediatamente anterior (2018-19) se fraguó el récord de ingresos de la historia del club y del fútbol español: 990 millones de euros. La estimación de la junta de Laporta prevé unos ingresos sensiblemente superiores a los que se registraron la temporada 2016-17, e inferiores a los de las campañas 17-18, 18-19 y 19-20. 

*Cifra todavía no oficial, a la espera de que la haga pública el club.