Los últimos cinco presidentes del Barça han sido imputados

En los últimos años, ser presidente del Barça se ha convertido en un cargo de alto riesgo. Desde el 1978, año en que tuvieron lugar las primeras elecciones completamente democráticas en Barcelona, todos los presidentes que han dirigido el club culé han tenido problemas importantes con la justicia. Y tres de ellos, los que menos simpatizan con el nacionalismo catalán, acabaron en prisión o haciendo noche en el calabozo. Algo que no parece coincidencia en una entidad todavía independiente, pero que lleva años amenazada por el poder político. 

Josep Lluís Nuñez, detenido por sobornar a inspectores de Hacienda

Esta lista de presidentes con problemas con la ley la estrenó Josep Lluís Nuñez. El que fuera presidente entre 1978 y 2000 fue acusado de sobornar a inspectores de Hacienda para eludir el pago de impuestos de los beneficios obtenidos por el grupo constructor que administraba. La condena a Núñez incluía falsedad de documentos oficiales, prevaricación y un delito de cohecho pasivo por los que entró a prisión 21 años después, el pasado 2014. Una condena de seis años que finalmente fue reducida a tres. 

Josep Lluís Núñez participando en un referéndum / Redes

Josep Lluís Núñez participando en un referéndum / Redes

Joan Gaspart, imputado por el caso Spanair

A Nuñez le siguió Joan Gaspart, que fue uno de los imputados en el conocido caso Spanair en el que se investigó la quiebra de la aerolínea española en 2012 y su entrada en concurso de acreedores de manera voluntaria. La justicia consideró que el expresidente azulgrana, como parte del consejo de la empresa, retrasó la solicitud del concurso con fines lucrativos. Sin embargo, Gaspart fue el único de los procesados que no tuvo que pagar los 10,8 millones que indicó la sentencia. Este no fue su único problema con la justicia. En 2018, volvió a ser imputado por presunta estafa a un príncipe saudí.

Joan Gaspart en una foto de archivo / EFE

Joan Gaspart en una foto de archivo / EFE

Joan Laporta, imputado por diferencias en los presupuestos del Barça

El actual candidato Joan Laporta tampoco se salva de aparecer en esta lista, aunque su caso es el más suave de todos. Fue imputado por un delito de injurias en 2008, acusado de intentar destruir el prestigio y credibilidad social del antiguo director del museo del club, Albert Pujol.

Su principal sombra en el ámbito económico fue la acción social de responsabilidad, aunque a Jan también se le ha vinculado con comisiones en Uzbekistán y con la ruina del Reus Deportiu. En 2010, cuando Sandro Rosell accedió a la presidencia del Barça, encargó una auditoría para saber el estado de las cuentas del club. El resultado fue, siempre según el entonces presidente, que las cuentas de la entidad ofrecieron en la última temporada un déficit de casi 48 millones, mientras que Laporta había presentado 11 millones de beneficios. Una diferencia de casi 60 millones de euros. 

Joan Laporta, en un acto de su candidatura | EFE

Joan Laporta, en un acto de su candidatura | EFE

Así, la Asamblea de Compromisarios del club decidió llevar al expresidente a los tribunales, así como al resto de la directiva del club, a los que se le reclamó 2,8 millones de euros a cada uno para cubrir las pérdidas del club. Unas acusaciones de las que finalmente fueron absueltos. 

Sandro Rosell, la prisión preventiva más larga de la historia

El otro expresidente azulgrana que entró en la cárcel fue Sandro Rosell, acusado de blanqueo de capitales y grupo criminal, relacionados con las comisiones del millonario fichaje de Neymar. Sin embargo, terminó siendo absuelto por "un error en la valoración de la prueba" y porque la Audencia no pudo probar la ilegalidad de la mediación en el contrato entre la Federación Brasileña de Fútbol y la empresa árabe con sede en las islas Caimán, International Sports Events (ISE). Tras 643 días en la cárcel, Rosell es la persona que protagonizó la prisión preventiva más larga de la historia de España.

Sandro también estuvo imputado por el Caso Neymar, que terminó con la condena penal del FC Barcelona por parte de la Audiencia Nacional. El último presidente del Barça y heredero de Rosell, Josep María Bartomeu, también estuvo imputado en este proceso. 

Sandro Rosell en el juicio / EFE

Sandro Rosell en el juicio / EFE

Bartomeu y el caso Barçagate

Finalmente, el último en añadirse a esta lista es el presidente más reciente del Barça, Josep María Bartomeu. Los Mossos de Esquadra actuaron de oficio y detuvieron a Bartomeu en el marco del escándalo del Barçagate. Tras pasar una noche en el calabozo, lo dejaron libre antes de declarar, junto a los dirigentes Masferrer, Grau y Gómez Ponti sobre la contratación de la empresa I3 Ventures para mejorar su reputación en redes sociales y criticar a diversas personalidades del entorno del Barça vistas, en ocasiones, como amenazas.

Josep María Bartomeu en una foto de archivo / EFE

Josep María Bartomeu en una foto de archivo / EFE

Evidencias que demuestran que ser presidente del Barça es cada vez más un cargo de alto riesgo. Todas sus acciones se miran con lupa, sobre todo si cuentan con unos pensamientos políticos alejados del gobierno catalán y, especialmente, de la antigua Convergència Democràtica de Catalunya.