El Barça ha vivido uno de los días más negros de su historia este 1 de marzo. Los Mossos d'Esquadra se personificaron a primera hora de la mañana en las oficinas del Camp Nou, en busca de información extra sobre el Barçagate. Un caso que lleva casi un año bajo investigación judicial, y del que se ha ampliado hasta en seis ocasiones el secreto de sumario. Todas las pistas se estaban analizando con detenimiento y en la sombra.
Por eso mismo sorprende que este lunes, los Mossos hayan decidido actuar de oficio, sin las órdenes de la juez que lleva el caso, y detener a cuatro pesos pesados de la antigua cúpula del Barça, como son Josep María Bartomeu, Óscar Grau, Román Gómez Ponti y Jaume Masferrer. Unas dudas que se acrecentan todavía más, teniendo en cuenta que el club está en la última y decisiva semana electoral.
El ataque final del independentismo
Precisamente, esta coincidencia ha alimentado la aparición de numerosas teorías sobre estas detenciones en el Barcelona. La primera, que es la que coge más fuerza, hace referencia al evidente interés político que hay en los próximos comicios a la presidencia del Barça. El independentismo se ha encontrado con una oportunidad de oro para tener a un presidente indepe en una de las entidades más importantes de Catalunya.
Laporta, junto a Puigdemont en un acto independentista | REDES
Y más teniendo en cuenta que el gran favorito es un Joan Laporta que es íntimo amigo de Carles Puigdemont. El líder independista lleva años trabajando en la sombra para que el independentismo tenga una presencia importante también en el Barça, y que el club culé pueda ejercer presión en la carrera por la independencia. El llevar a cabo detenciones estaba previsto hace tiempo, pero como Bartomeu acabó dimitiendo antes de lo que se esperaban, han decidido actuar la semana antes de las elecciones.
Una decisión que beneficia indirectamente a un Laporta que representa las ideas más alejadas a Bartomeu. Precisamente, también es tremendamente sospechoso el acoso de los Mossos a los presidentes del Barça que no han simpatizado con el nacionalismo catalán (Convergència). Núñez, primero; Rosell, demostrándose su inocencia, después, y ahora meten en el calabozo a Bartomeu, detenido; son los tres presidentes del club blaugrana con problemas con la justicia en los tiempos recentes.
Finalmente, hay que destacar que toda esta polémica favorece también al líder de Estimem el Barça de cara a unos próximos debates en los que las condiciones se están suavizando. Con todo lo que ha sucedido, parte del debate se verá eclipsado y los otros dos aspirantes no se dedicarán tanto a atacar su proyecto, sino a comentar este tema de máxima actualidad. Además, Laporta tiene la fortuna de que el debate de TV3 que tenía que ser de dos horas, finalmente será solamente de una hora. Otro guiño a Laporta de su amigo Vicent Sanchís, director de TV3 ahora y director de Barça TV cuando Jan era el presidente del club.
Tensiones con los Mossos
Asimismo, las otras dos teorías señalan directamente a los Mossos d'Esquadra. La primera nace a raíz de las protestas por Pablo Hasel. En medio del clima de tensión y de represalías que vive Barcelona, a los Mossos les convenía hacer ruido con otra polémica para desviar la atención de la situación de conflicto que se está viviendo en la ciudad condal, con todas las críticas que se han generado hacia ellos, siendo criticados desde el propio Govern por CUP y ERC.
Los Mossos, en el registro en las oficinas del Camp Nou | EFE
Finalmente, desde hace varios años existe una cierta tensión entre los Mossos y el Barça, fruto de la desconfianza sobre todo por parte del club. Esto ha desencadenado que varias operaciones y denuncias, como las investigaciones de antifraude por el tráfico y falsificaciones de carnets, o cómo la última demanda por falsificación de firmas en la moción de censura; las hayan puesto en manos de la Guardia Civil. Algo que no ha gustado a los Mossos, que hace años que tenían ganas al Barça.