Laporta no descarta poner otro nombre al Camp Nou

Joan Laporta sigue firme en la carrera que le ha de devolver a la tan ansiada presidencia del FC Barcelona. Desde que la dejó en 2010, no ha perdido el deseo de regresar a la poltrona que preside las oficinas de Arístides Maillol. Tras fracasar en 2015 y ejercer durante una década una oposición pasiva, aunque contundente cuando se pronunciaba, ahora está más cerca que nunca de volver.

Ya queda menos de un mes para los comicios a la presidencia que se celebrarán el próximo 7 de marzo. Sin embargo, los 22.811 solicitantes del voto por correo tienen tan solo hasta el 26 de febrero para decidirse. Por este motivo, las dos próximas semanas se prevén decisivas. Los casi 23.000 votos que hay en juego representan la mitad de la masa social que se movilizó en las elecciones de 2015 (46.574).

Esta es una de las razones por las que los candidatos siguen celebrando actos y convocando ruedas de prensa en la que es, sin lugar a dudas, la campaña electoral más larga de la historia del club: habrá durado un total de 55 días. Aunque prefiere evitar los debates, y el riesgo a perder votantes que siempre conllevan, Laporta sigue presentando su programa. Este jueves le tocó al Espai Barça.

Traslado temporal a Montjuïc

Uno de los aspectos que sorprendió de su propuesta es que coincide con la opinión de otros precandidatos que fueron tumbados en la recogida de firmas. Tanto el exdirectivo Xavier Vilajoana como Agustí Benedito abogaron por trasladar temporalmente a los socios al Estadi Olímpic de Montjuïc. Laporta se suma a esta propuesta por un motivo: quiere tener el Espai Barça en 2024, el año que se celebra el 125º aniversario del club.

La maqueta del Espai Barça de Bartomeu que quiere modificar Laporta / FCB

La maqueta del Espai Barça de Bartomeu que quiere modificar Laporta / FCB

Para poder tener el nuevo estadio construido en tan precoces fechas, será necesario realizar una auditoría en cuanto el presidente tome posesión del cargo. Pero la clave será renegociar la deuda y generar la entrada de nuevos ingresos. Y uno de los activos que más dinero puede generar es el propio Espai Barça.

La junta directiva saliente, que presidía Josep María Bartomeu, estimó unos ingresos anuales extra de 150 millones de euros gracias a la ampliación de localidades, la construcción de más (y más caros) palcos VIP, la incorporación de más puestos destinados al food and beverages y restaurantes, o la modernización del museo con nuevos activos monetizables. Todo esto, sin olvidar la joya de la corona: una marca comercial para nombrar al estadio.

Opción ‘Rakuten Camp Nou’

La propuesta de Bartomeu siempre giró en torno a la posibilidad de vender los title rights, es decir, el apellido del Camp Nou. Por tanto, la propuesta de la junta saliente pactada con Goldman Sachs pasaba por una fórmula como esta: Camp Nou Rakuten. En cambio, Laporta está abierto a vender el naming right del estadio, lo que supondría un ligero cambio: Rakuten Camp Nou.

Joan Laporta presentando su proyecto del Espai Barça junto a Juli Guiu, Elena Fort y Jordi Llauradó / 'Estimem el Barça'

Joan Laporta presentando su proyecto del Espai Barça junto a Juli Guiu (izquierda), Elena Fort y Jordi Llauradó / 'Estimem el Barça'

De momento, no hay nada confirmado ya que todo está en una fase muy embrionaria. Pero el principal responsable de gestionar esta cuestión en la candidatura de Laporta, Juli Guiu, confirmó a Culemanía que por el momento no se descarta la posibilidad de vender el naming right. Esta sería, sin duda, una de las principales diferencias con respecto a la propuesta de Bartomeu, que también descartó la posibilidad de mudarse provisionalmente a Montjuïc tras estudiarlo.

Guiu también explicó que quieren estar muy abiertos de miras con el tema de los naming rights, en el sentido de que no solamente trabajarán para poner una marca que dé nombre al Espai Barça, sino que se plantean poder tener muchos patrocinadores. Aunque esta propuesta no es del todo novedosa, ya que también la contemplaba la junta de Bartomeu, la fórmula consistiría en poder poner una marca junto al Camp Nou, otra para el Palau Blaugrana, otra para el Johan Cruyff, otra para la Ciutat Esportiva Joan Gamper u otra para La Masía.