Después de la tormenta, llega la calma. El pasado 20 de octubre fue un día movido. Cayó en sábado y se celebraron distintos acontecimientos en el Camp Nou y los terrenos anexos. Por un lado, la asamblea de compromisarios, que arrancó durante la mañana en el Palau Blaugrana. Del otro, el Barça-Sevilla con el liderato de la Liga en juego.
“Vaya día... lo mejor es que ya se acaba”, comentaba un miembro de la cúpula del club al terminar la jornada. La lesión de Leo Messi heló el Camp Nou y eclipsó en buena medida los sobresaltos suscitados durante la prolongada asamblea.
El tema candente fue la votación del escudo, revocada del orden del día por el presidente Bartomeu tras asistir a una numerosa representación de socios contrarios a la propuesta. El malestar generado por la imposibilidad de votar, llevó a un posterior voto de castigo en otra propuesta.
Las polémicas del escudo y el crédito
La junta directiva esperaba aprobar un techo superior para el porcentaje de crédito permitido previsto en los estatutos del club. La moción fue rechazada, sentando un precedente histórico.
Dos polémicas que podrían haber pasado factura pero que poco a poco se van superando hasta quedar diluidas. La clave siempre pasa por que la pelota entre. Y lo está haciendo.
Muchos votos en contra del aumento del techo de crédito un 10% / EFE
Pero pese a la lesión de Messi y la capacidad que Valverde y sus jugadores han tenido para sobreponerse a ella durante las dos últimas semanas, la polémica del escudo ha seguido encendida. Con una llama bien nimia, pero viva al fin y al cabo.
Señalados
Hasta el punto de que algunos medios de comunicación se dedicaron, recientemente, a buscar y señalar a los culpables del tema del escudo. Además de cargar contra la propia directiva, cuyo responsable para esta cuestión fue el vicepresidente Jordi Cardoner, fueron a por un ejecutivo.
Guillem Graell, director de Marca FCB y responsable en departamentos como marketing, comunicación o relaciones institucionales y protocolo, quedó como el principal señalado.
El exdirector de comunicación y marketing en el grupo Codorniu Raventós asumió las funciones para disparar la Marca Barça en todo el mundo y el tema del escudo era tan solo uno de los muchos aspectos previstos en su nuevo plan estratégico de marca, mucho más ambicioso.
Cuestión de responsabilidad
Fuentes del club preguntadas por Culemanía sobre Graell cierran filas y aseguran que “la responsabilidad no se delega, la directiva debe asumir la responsabilidad”.
Guillem Graell, director de marca FCB refrendado por la junta directiva del Barça / FCB
Graell tiene autoridad por su cargo para efectuar una propuesta sobre una modificación en el escudo, cuyo diseño fue encargado a la marca Summa, pero la responsabilidad la tiene la junta directiva. “Y la directiva lo aprobó en junta”, aseguran.
“No hay que señalar a los ejecutivos, si alguno no funciona es potestad de la junta prescindir de él”, zanjan las mismas fuentes, que descartan la posibilidad de que se vaya a despedir a Graell.
Graell, apoyado por la junta
En general hay satisfacción con su trabajo y recientemente estuvo en China negociando nuevos asuntos de sponsors, uno de los temas capitales para el crecimiento en marketing del club.
La conclusión, por tanto, es que las explicaciones que Graell ofreció en su momento sobre la modificación del escudo y la supresión de las letras FCB convencieron a la junta y por ello se votó a favor. En este sentido, la directiva defiende a su ejecutivo y pasa página.
Nuevo diseño, paralizado
También confirman que por el momento no hay ninguna propuesta de nuevo diseño en marcha y que el escudo se dejará como está desde 2002. Al menos, hasta que el tema se enfríe del todo.
“Y en caso de que se pusiese en marcha otra vez, quedó bastante claro que las letras deben permanecer en el logo”, sentencian.