Bartomeu rompe su silencio prolongado tras dejar el Barça: desmontado el ‘caso Negreira’

Josep Maria Bartomeu sale "satisfecho" tras su declaración como imputado por el caso Negreira. Este jueves, el expresidente del FC Barcelona ha acudido a la Ciutat de la Justicia por petición de la jueza Alejandra Gil, al juzgado de instrucción número 13.

El antiguo mandamás del Barça, a la salida de la sala, habló por primera vez tras abandonar la presidencia del club catalán. Y alzó la palabra para hablar rotundamente sobre el pago de 7,3 millones de euros a las empresas de José María Enríquez Negreira durante 18 años. "Muchas teorías que se han vertido han quedado anuladas", ha asegurado Bartomeu.

Una "compensación económica"

El empresario catalán ha declarado el mismo día que Sandro Rosell. Ambos incidieron ante la jueza en que todos los éxitos del Barça tuvieron su origen en que, por aquel entonces, era "el mejor equipo del mundo". También se personaron ante la justicia Òscar Grau, exdirector ejecutivo, Albert Soler, exdirector de deportes profesionales, Javier Enríquez, hijo del vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), y su pareja, Ana Paula Rufas.

Josep Maria Bartomeu acude a declarar por el 'caso Negreira' EFE

Bartomeu contestó a Javier Enríquez, quien habría justificado los pagos del Barça como poco éticos. El expresidente culé ha admitido todo lo contrario: "Se ha aclarado que había unos servicios de asesoramiento deportivo en cuanto a pre y postpartido, tanto del Barça A como del Barça B y que, en ese momento, había una compensación económica a pagar".

"El delito no va a prosperar

Su abogado, Josep Maria Fusté Fabra, lo ha explicado de manera más técnica: "Ha quedado acreditado que hay pagos, es cierto, pero hay contraprestación. Con lo cual, jurídicamente, independientemente de las especulaciones que la prensa legítimamente puede hacer, hay pagos porque hay contraprestación".

Javier Enríquez, hijo de José María Enríquez Negreira, vicepresidente del CTA EFE

Otra de las teorías que, según ambos, ha quedado "disipada" es la que vincula la salida de Enríquez Negreira del CTA a la de su hijo del Barça. Según Bartomeu, "ha quedado claro que no tiene nada que ver".

A este hecho, hay que añadirle, según Fusté Fabra, que "nadie ha dicho que Enríquez Negreira ofreciera ningún pago a árbitros por inferir en el resultado". "La conclusión que sacamos es que jurídicamente tenemos defensa y, como nadie va a poder demostrar que no existe la corrupción en el deporte, el delito no va a prosperar", ha sentenciado el letrado.