El Barça, pese a los malos momentos de tesorería y reputación que atraviesa, es uno de los clubes más seguidos y más queridos del mundo. Una fuente de inspiración para muchos, incluso para otros equipos que hasta le copian el escudo. No es una exageración: un campeón europeo imitó la enseña azulgrana para rediseñar la suya en 2008.
Se trata del FC Nantes, fundado en 1943, ocho veces ganador de la Liga francesa y otras cuatro de la Copa gala. Sin embargo, y pese a los tiempos dorados de la entidad de la costa atlántica, también llegaron épocas de nubarrones, hasta el punto de que enfrentó una gran reestructuración en 1992 a causa de graves problemas financieros.
Votación popular
A lo largo de su historia, el Nantes ha tenido diversos escudos, casi todos con referencias marítimas –ya fuese una goleta, una ola o ambas–, pues es el equipo de una ciudad portuaria. Pero, en 2007, el empresario polaco-francés Waldemar Kita –ya es el presidente que más tiempo ha estado al frente de los Canarios– compró el club y quiso dejar su impronta en él con un nuevo cambio de emblema.
Kita presentó tres opciones en el periódico Ouest France, y los aficionados –el 57% de los 4.089 votos que llegaron– eligieron una inspirada en el escudo del FC Barcelona. La forma, sin ser idéntica, se parecía, y el interior estaba dividido en las mismas zonas: en la superior, donde el Barça tiene la cruz de Sant Jordi y la senyera, el Nantes lucía la histórica goleta y unos símbolos heráldicos, armiños, que tienen su origen en Bretaña; en la inferior, como la insignia azulgrana, había franjas verticales –en este caso, verdes y amarillas– y un balón de fútbol; y en el centro del emblema, el nombre del equipo.
Otro cambio
De todos modos, el escudo barcelonista del Nantes pasó a mejor vida en 2019, cuando el club presentó uno nuevo, más minimalista, en el que destaca la N y en el que el único elemento que se conserva del anterior es el armiño heráldico.