Es imposible. Neymar no volverá al Barça mientras esté la junta directiva actual. Su salida hizo mucho daño en el club, se sintieron engañados por la forma en que actuaron el futbolista, su padre y todo su entorno tóxico que le mal asesorar.
Neymar es una operación imposible aunque él está loco por volver a Barcelona y sobre todo, por salir como sea de Paris. No ha encajado en la ciudad, ni el club y aún menos en un vestuario lleno de egos que le hacen sombra en todos los ámbitos. Está harto y el último revés le ha venido con la selección: Tite le ha retirado el brazalete de capitán.
Hace poco más de 15 días el brasileño estuvo viendo el GP de Fórmula 1 en Montmeló, siempre que puede se escapa a Barcelona, y en esta última escapa y tal y como ya había hecho en otras anteriores, Neymar dejó caer a algunos de los amigos que aún tiene en la ciudad Condal que el curso que viene volverá al Camp Nou. Pues no Ney, no será así. En el Barça tienes cerradas todas las puertas y me parece la mejor noticia posible.
Rubi: el sueño frustrado del Camp Nou
Salir de un club cuando y como quieres, en el caso de Rubi tras clasificar al Espanyol para jugar en Europa 12 años después de su última participación. El técnico catalán tiene todo el derecho a poner punto y final a su etapa como blanquiazul, no entiendo tanta indignación.
El mismo derecho que tienen los clubes de despedir a sus entrenadores cuando los resultados no acompañan, es el que tienen los entrenadores a decidir su futuro cuando les llegan otras propuestas. Esto vale para todos, también para Rubi, al que un sector del españolismo quiso echar a media temporada y no pudo. Rubi les ha llevado a Europa y ahora le reprochan que se marche al Betis. No lo entiendo, de verdad. ¿Qué haríais vosotros si os pagaran el triple, dispusiérais de una plantilla mejor y contárais con un proyecto más ambicioso? Tenemos clara la respuesta.
Rubi en un partido con el Espanyol / EFE
A Rubi nunca se la ha valorado lo suficiente, tampoco el Barça. En 2013 se incorporó al staff técnico de Tito Vilanova quien confiaba en él plenamente. Aquella maldita enfermedad que apartó a Tito de los banquillos abría las puertas del Camp Nou a Rubi aunque finalmente la decisión en primera instancia fue la dupla Roura-Altimira y después la apuesta se llamó Tata Martino. Un error grave. El Barça tenía un diamante en casa que no supo aprovechar. Conocía el club, apostaba por una filosofía reconocible y contaba con el visto bueno del vestuario. A día de hoy, Rubi probablemente también hubiera sido un buen relevo para Ernesto Valverde. De momento, no será así. Suerte, y viva Rubi 'manque' pierda. Me parece un gran tipo.
Ha vuelto el Barça del 'Tata'
Un 27 de mayo del 2009 el Barça se proclamaba campeón de Europa. Un 27 de mayo de 2009 el Barça ganaba el primer triplete de la historia. Han pasado 10 años y 3 días, mucho han cambiado las cosas desde entonces, el Barça se ha desnaturalizado y la historia esta temporada ha sido bien distinta.
El curso actual se ha cerrado con un título de Liga ganado de manera incontestable, dejando al Real Madrid en unos históricos 19 puntos de diferencia y consolidando un liderazgo de cuatro campeonatos domésticos de los últimos cinco, pero desgraciadamente la temporada no será recordada por este triunfo. La temporada será recordada por la debacle de Anfield y la derrota en la final de Copa. La historia de este curso será demasiado cruel con el Barça.
Veo al equipo tocado anímicamente, físicamente y en su propuesta de juego. Me recuerda demasiado al año del 'Tata' Martino. El equipo necesita una sacudida, el equipo necesita una reacción. Hace un mes estábamos hablando del triplete y hoy de fracaso absoluto. Quizás antes no era para tanto, ni ahora es para tan poco pero toca tomar decisiones.
Jugadores, banquillo, dirección deportiva... Hay que buscar a los responsables de este mal final de curso y es necesario encontrar soluciones futbolísticas que vayan más allá de Messi. El verano será movidito.