Culemanía tuvo la brillante idea de agitar el avispero blaugrana invitando a cuatro reconocidos barcelonistas (Joan Gaspart, Eduard Romeu, Xavi Vilajoana y  Emili Rousaud) para hablar sobre el presente y el futuro del club. Bajo la batuta de un presentador/moderador de altura (nunca mejor dicho), Víctor Malo, y del savoir faire de Lluis Regàs como anfitrión, el debate transitó por zonas sinuosas, sobre todo cuando se abordó la situación económica del club y el Espai Barça. Mientras que Gaspart y Romeu defendían con tesón la gestión de Joan Laporta, un vehemente Vilajoana torpedeaba todos los argumentos. Bajo la cantinela, "no estoy dispuesto a que me tomen por idiota", el ex capitán de la sección de fútbol sala y ex directivo con Josep Maria Bartomeu desplegó un abanico de razonamientos contra el actual presidente blaugrana. Sobre todo, respecto al nuevo Camp Nou, donde Vilajoana, además, es en cierto modo parte implicada, al representar a empresas constructoras españolas. "No tiene ningún sentido buscar fuera cuando tienes en casa a las mejores", aseguró. 
El debate tuvo momentos intensos y hasta divertidos, como cuando Gaspart negó ser laportista, "soy presidencialista", o se mostró un tanto escéptico cuando le emplazaron a repetir el debate dentro de diez años, "no sé si estaremos, vosotros a lo mejor, que sois jóvenes". El ex presidente redundó sobre la idea de que "nadie se acuerda quién fue la constructora del Camp Nou". Cuando un asistente experimentado, Quim Molins, le puso nombre (Indra), el bueno de Gaspart replicó: "Tú eres muy veterano y no cuentas".
De esta forma tan amena fue desarrollándose el debate, con un Rousaud prácticamente de invitado de piedra --sus aportaciones fueron planas y anodinas--, un Gaspart, entre chisposo y nostálgico, un Romeu, que parece aún tener los dos pies en la junta directiva, y un Vilajoana con ganas de jarana.
Y entre los asistentes muchas caras conocidas y reconocidas del barcelonismo como Domènec Garcia, el que fuera asesor de Josep Lluís Núñez, y Albert Roura, quien llevó la comunicación de Victor Font en la última campaña. 
¿Conclusiones? Pues que el Barcelona sigue siendo foco de debate interno y externo, que los 'ismos' siguen más vivos que nunca, que el club está mejor que hace tres años (Gaspart), pero también mucho peor (Vilajoana) --el gato de Schöridenger blaugrana, capaz de estar vivo y muerto a la vez--, que el Espai Barça es "una operación de alto riesgo" (Vilajoana) y una demostración de los arrestos de Laporta (Gaspart), "llevábamos treinta años esperando que alguien de atreviera" y así 'ad infinitum'. Un auténtico galimatías para cualquiera que intente descifrar cómo está el club: está sano y en la UCI a la vez, según con los ojos que lo mires.
Esperamos ya con expectación la segunda edición de este cónclave blaugrana organizado por Culemanía. Y que no sea dentro de diez años porque queremos seguir disfrutando de las ocurrencias y el barcelonismo del bueno de Gaspart.