No sé si es una broma de mal gusto, una cámara oculta o es que alguien nos está haciendo budú pero el caso es que ya no hay por dónde cogerlo. Después de un inicio esperanzador del equipo y de un estado físico inmejorable de la plantilla, ahora nos han venido todos los problemas de golpe.
El último es Bellerín, uno de los nombres que estaba llamado a tener protagonismo con las bajas de Koundé y Araujo que también se suma a la larga lista de lesionados. ¿Y ahora qué? Opción Barça B, reconvertir a alguno de los centrales, jugar con un lateral a pierna cambiada o directamente pasar a una defensa de tres.
Realmente no hay ninguna opción que me convenza al 100% pero por ahí tendrán que ir las cosas. El gran inconveniente es que no hay tiempo para pruebas, no hay margen de error. Mallorca, Inter, Celta, otra vez Inter, Real Madrid, Villarreal, Athletic Club, Bayern y Valencia en el temible mes de octubre. De locos y sólo por valientes.
Por otro lado también me gustaría incidir en la decisión de Ronald Araujo. El uruguayo ha puesto por delante al Barça al Mundial, una cita que nadie querría perderse. Muchos cuestionaban su compromiso con el club, pero Araujo ha vuelto a demostrar que, aunque no lleve el brazalete, es un auténtico líder, un capitán en la sombra.
Las especulaciones sobre su tratamiento también generaron todo tipo de debates y críticas como que de no operarse sería el nuevo Umtiti. Vayan pasando en fila de uno para tragarse sus palabras todos aquellos críticos que tienen que demostrar algo más de respeto por un grandísimo profesional como Araujo.
A la Xavineta se le han caído algunas piezas básicas y aunque hay alternativas, nos duele en el alma que una de ellas sea el bueno de Ronald, un culé de pies a cabeza. Estamos contigo búfalo, muchos ánimos.
