Juan Carlos Navarro fue homenajeado en el Palau Blaugrana antes del partido entre Barça Lassa y Real Madrid / EFE

Juan Carlos Navarro fue homenajeado en el Palau Blaugrana antes del partido entre Barça Lassa y Real Madrid / EFE

Culemaníacos

El Real Madrid vuelve a hincar rodilla ante el Barça en el homenaje a Navarro

La victoria frente al eterno rival (77-70) encarrila la clasificación de los azulgrana hacia cuartos de final

1 marzo, 2019 22:59

No se puede decir que el Barça Lassa haya vuelto pero es justo señalar que está muy cerca de hacerlo. El conjunto azulgrana logró una victoria de tremendo calibre ante el Real Madrid con la que encarriló la clasificación para los cuartos de final de la Euroliga. Los de Pesic cimentaron su victoria en la defensa: dejar a los blancos en 70 puntos es prácticamente sinónimo de victoria. En ataque fue clave la dirección de Heurtel, el acierto exterior de Kuric y el dominio interior de Tomic.

Es la tercera victoria consecutiva de los catalanes sobre los madrileños teniendo en cuenta también el fútbol. Primero fue la Copa del Rey de baloncesto, posteriormente las semifinales del torneo copero de fútbol y por último hoy, cuya transcendencia va más allá del clásico: se logró vencer a uno de los tres mejores equipos de Europa, a un conjunto que en las dos anteriores visitas al Palau en motivo de la Euroliga ganó muy cómodamente.

Pesic da órdenes a sus hombres durante el Barça Lassa-Real Madrid / EFE

Pesic da órdenes a sus hombres durante el Barça Lassa-Real Madrid / EFE

Svetislav Pesic da órdenes a sus hombres durante el Barça Lassa - Real Madrid / EFE

La velada no podía empezar mejor en el Palau. El mito barcelonista Juan Carlos Navarro recibió un merecido homenaje. Desde anoche, su camiseta permanecerá colgada en el pabellón. El escolta saltó a la pista pasando por el medio de un pasillo formado por jugadores de la base y del primer equipo. En el homenaje estuvieron también las leyendas culés Solozábal Jiménez y su buen amigo Felipe Reyes, con el que compartió tantos éxitos en la selección española.

El primer cuarto lo ganaron las defensas

Empezó el encuentro como si el que se disputó hace doce días en motivo de la final de la Copa del Rey no hubiese terminado. La intensidad y la defensa fueron las señas de identidad. El partido no era fluido y se acumulaban los fallos en una y otra canasta. Los dos equipos fallaron esos tiros liberados que normalmente entran. El Real Madrid acabó el primer cuarto con un 1 de 9 en triples, una estadística poco común en un equipo con Llull, Campazzo, Randolph y compañía.

Solo dos hombres fueron capaces de romper la monotonía, uno para cada lado. En el blaugrana, el de siempre, Thomas Heurtel, que anotó los siete primeros puntos del FC Barcelona. Fue el desatascador y el que dio confianza al resto de compañeros. En el bando blanco fue Carroll, bestia negra del club catalán, el que mantuvo a su equipo por delante en los últimos instantes del primer cuarto (16-17). 

GigAnte Tomic

Nada tuvo que ver el segundo cuarto con el primero. El Barça se puso con problemas de faltas muy pronto: a falta de ocho minutos y medio de llegar al descanso, el equipo azulgrana ya estaba en bonus. El Real Madrid empezó mucho más enchufado y llegó a ponerse con una ventaja de ocho puntos (21-29).

Entonces emergió la figura de Ante Tomic. El croata, que había sufrido mucho con la defensa de Tavares en el inicio del encuentro, empezó a anotar sin parar. Hasta 12 puntos. Remontó prácticamente solo el marcador: del 21-29 se pasó al 37-33. El pívot estuvo escudado por Kyle Kuric, que convirtió dos triples y un total de ocho puntos. Al descanso, el Barça se estaba comiendo al Real Madrid (42-37).

Ante Tomic intenta superar a Gustavo Ayón / EFE

Ante Tomic intenta superar a Gustavo Ayón / EFE

Ante Tomic intenta superar a Gustavo Ayón / EFE

Una tendencia que siguió tras la reanudación. Los azulgrana se llegaron a poner 13 puntos por encima (50-37) de la mano, otra vez, de Kuric Tomic. Los blancos aún no habían vuelto del descanso: perdieron hasta 4 balones a causa de la precipitación y las prisas. Habían pasado casi cuatro minutos del tercer cuarto y el Real Madrid aún no había encestado.

Hasta que llegó el de siempre, Sergio Llull, que no pisaba la pista desde el primer cuarto. El menorquín anotó cuatro puntos consecutivos para meter a su equipo en el partido y de paso lograr que la ventaja bajara de los diez puntos (50-41). Randolph Rudy ayudaron al base para que el Real Madrid metiera el miedo en el cuerpo a un Barça que sin Heurtel Tomic en pista sufría mucho. Los blancos lograron que el tercer cuarto acabara igual que empezó (56-51).

Defensa, Heurtel y Tomic

El último cuarto empezó de la misma forma en la que comenzó el partido. En los primeros cuatro minutos ambos equipos estuvieron enormes en defensa pero muy erróneos en ataque. Decidieron las individualidades y anoche las blaugrana fueron superiores a las madridistas. El hombre de los momentos calientes, Thomas Heurtel, desatascó el encuentro y puso a su equipo 13 arriba. El Real Madrid se acercó pero ahí estaba Tomic para denegarle la remontada. A falta de 55 segundos y tras un rebote ofensivo, situaba en el marcador el 77-70 a la postre definitivo.

El Palau vivió una gran noche y los madridistas, el segundo revés de la semana. Puede no ser el último en el caso de que el próximo 2 de marzo, en un encuentro correspondiente a la Liga de fútbol, el Barça vuelva a ganar en el Santiago Bernabéu y acabe con las opciones de que los blancos levanten el título.