De Jong, Griezmann y Messi celebran a lo grande la remontada en Granada

¡Euforia en Los Cármenes! El Barça de Koeman rubricó su primera noche épica que acerca a los azulgranas al que podría ser el primer y único título de esta temporada. Hay que ir con cautela, partido a partido, como dice el técnico holandés, tomando prestada la filosofía cholista que el propio Simeone está empleando para amarrar el título de Liga. Sin embargo, en Granada tocaba celebrar. 

Fue un partidazo. Pero el fantasma de la falta de gol se apareció y todo el mundo dio por sentado que el Barça se quedaba fuera de la Copa. En el minuto 88 el resultado todavía era demoledor a favor del Granada (2-0). Una carambola de Griezmann, que entró más por fe que por acierto --hubo muchísimas ocasiones mucho más claras que abortó Aarón, en una gran exhibición--, sirvió para levantar el ánimo y en los cuatro minutos del tiempo de prolongación, Jordi Alba anotó el segundo en otra gran combinación con El Principito. 

Luego, en la prórroga, siguió la emoción. El gol de Griezmann, otra vez en combinación con Jordi Alba, fue respondido en seguida gracias a un penalti inexistente que señaló Sánchez Martínez. Empató el Granada (3-3), pero los nazarís estaban sin fuerzas y el Barça, ya habituado a los partidos de 120 minutos, demostró una gran fortaleza física y mental para seguir insistiendo hasta derrocar al rival con otros dos goles de De Jong y nuevamente de Alba. El luminoso reflejaba un llamativo 3-5 con cuatro goles en la prórroga, tres del Barça. 

Entrevistas de colegas 

Tras el encuentro, el vestuario era una fiesta. Se nota el feeling entre los nuevos componentes de un equipo en formación, donde las ganas e ilusión de los jóvenes suman enteros a la experiencia de los veteranos, que son menos pero siguen siendo decisivos. Griezmann, una primera espada mundial con espíritu de Peter Pan se ha convertido en el gran enlace entre veteranía y juventud... sobre el césped cada vez se asocia mejor con Messi y Jordi Alba, asumiendo por derecho la vacante que dejó Luis Suárez. Fuera del verde, sus habituales sonrisas generan una sintonía demoledora con jóvenes como Frenkie de Jong y Riqui Puig. La confianza que transmite el galo es clave para los que empiezan. 

De hecho, ese carisma que transmite el francés está siendo una constante tras las grandes victorias, donde ya se le ha visto en varias entrevistas compartidas que antes de él eran inexistentes. Lo vimos con Coutinho hace unos meses, lo vimos haciendo broma en entrevistas de Riqui Puig al pasar por detrás y lo hemos vuelto a ver este miércoles con De Jong. Los dos demostraban la complicidad de dos de los jugadores más en forma del equipo junto a Pedri, Araujo y el propio Jordi Alba. 

"Hemos tenido una mentalidad ganadora de darlo todo hasta el último minuto", dijo Griezmann tras el partido en su entrevista compartida con De Jong. Y luego remarcó la clave: "Sé que tengo la confianza del míster y de los compañeros, y eso es muy importante". 

"El gol de Antoine nos ha hecho creer, se han puesto nerviosos y esto habla muy bien de la mentalidad del equipo", expuso de De Jong después de hacer broma con su compañero. 

El propio Messi, que no quiso hablar tras el partido, ofreció su particular celebración a través de las redes sociales con una publicación en Instagram donde no dijo nada, pero lo decía todo con la primera imagen: el equipo haciendo piña. Mientras en París siguen calentando su posible fichaje, y de rebote a Koeman, el astro argentino demuestra su implicación con el Barça dentro y fuera del campo. 

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Jordi Alba también compareció ante los medios tras el encuentro y valoró muy positivamente su conexión con Griezmann, el héroe del partido. Aunque realmente hay que destacar el papel de Alba que cambió por una vez a Messi para conformar una sociedad letal con Antoine. "Hemos estado unidos, creímos en que podríamos remontar y lo hemos conseguido", dijo el de L'Hospitalet antes de destacar el carácter: "Lo más importante es la actitud que ha tenido el equipo, con eso me quedo".