Guardiola barre al todopoderoso Real Madrid de la Champions con goleada

Se ha hecho justicia en el Etihad Stadium. El estadio ha presenciado un baile descomunal del Manchester City (4-0) contra el Real Madrid en la vuelta de las semifinales de Champions League. Los de Guardiola fueron superiores de principio a fin en el compromiso, siendo Courtois el único obstáculo que evitó que se diera un resultado mucho más histórico. El técnico catalán regresa nuevamente a una final de la gran competición continental gracias al doblete de Bernardo Silva, autogol de Eder Militao y el tanto final de Julián Álvarez.

La frustración de los jugadores del Real Madrid al gol de Bernardo Silva / EFE

La frustración de los jugadores del Real Madrid al gol de Bernardo Silva / EFE

El Real Madrid se despide del torneo y de la temporada. Alcanzaron las semifinales, pero no les dio suficiente gasolina para tratar de hacer frente al que es probablemente el mejor equipo del mundo. Su año también cierra con la decepción de no haber logrado competir contra el FC Barcelona en la Liga. La única noticia positiva de este final de curso es la Copa del Rey, aunque para el sector merengue eso tiene poco sabor.

Un torbellino en el Etihad

El City firmó probablemente uno de los mejores primeros tiempos de su historia en el torneo continental. No solo por anotar dos goles contra su rival, el vigente campeón de la competición, sino también por dominar de forma tan abusiva. La presión de los de Guardiola fue sobresaliente, lo que impidió que el Madrid tuviera capacidad para conectar pases o acercarse a campo contrario. A partir de allí se generaron dos ocasiones clarísimas de Haaland, pero Courtois evitó que la balanza se inclinara tan rápidamente.

Bernardo Silva, eufórico, tras anotar dos goles contra el Real Madrid / EFE

Bernardo Silva, eufórico, tras anotar dos goles contra el Real Madrid / EFE

A pesar de esa poca precisión en dichas jugadas –además la soberbia actuación del portero merengue--, el conjunto citizen no desistió de su plan. Lograron pegar con fuerza a partir de la presencia de Bernardo Silva, que se vistió de goleador en la primera parte. Su gol inicial fue tras una maravillosa acción de Kevin de Bruyne, mientras que el segundo tanto llegó con un cabezazo certero. El Madrid estaba totalmente noqueado por el colosal fútbol del City.

Baile de novela

El equipo de Ancelotti intentó revertir el complicado panorama, pero no estaban fluyendo en ataque. La defensa de los sky blues fue bastante sólida en la segunda mitad. Las grietas en el bloque merengue se empezaron a abrir cada vez más, por lo que los de Guardiola tuvieron más de una ocasión para contragolpear a campo abierto. De Bruyne intentaba conectar lo máximo posible con Haaland, aunque sin todo el éxito posible.

El anhelado tanto de la calma llegó en tiro libre. La ejecución de De Bruyne buscaba a Akanji, que pudo cabecear un balón que se terminó desviando en Militao. Una anotación que hizo estallar por completo a los aficionados presentes en el Etihad Stadium y que le da a Guardiola la posibilidad de pelear por otro título de Champions League.  Mientras que el Madrid se despide de la competición con la sensación de haber sido aplastado por un rival que tuvo las ideas claras en todo momento.