Cinco detenidos en el Bernabéu por vender entradas falsas para el clásico

Tres días después del clásico, este miércoles, se conoció que la Policía Nacional detuvo a cinco personas por vender entradas falsas del clásico entre Real Madrid y Barcelona por un precio de 200 euros hasta los 800. Los vendedores actuaban en los aledaños del Santiago Bernabéu.

Según informa la Jefatura Superior de Policía, en el momento en que fueron detenidos se les incautaron hasta 15 entradas falsas, seis teléfonos móviles y 500 euros en efectivo. Además, se localizaron a varias de las víctimas y se comprobó que no contaban con las medidas de seguridad obligatorias, se trataban de entradas falsificadas.

Los cinco detenidos formaban parte de un grupo bien organizado en que cada uno tenía su función concreta. Algunos se encargaban de captar a las víctimas y ofrecerles las falsificaciones. Si estos accedían, se comunicaban con los que tenían las entradas, que esperaban lejos de la multitud.

Policía Nacional en los aledaños del Bernabéu / EFE

Policía Nacional en los aledaños del Bernabéu / EFE

El objetivo de este movimiento era por si, en el caso de ser interceptados por la policía, no les encontraran muchas entradas falsificadas. Los que fueron arrestados incluso llegaron a ofrecer a los cuerpos de policía de paisano tres entradas -falsas- al “buen precio” de 900 euros negociables.

Por esas acciones, los cinco detenidos -se desconoce si había más integrantes- están acusados de delitos de estafa y falsedad documental al vender entradas ilegítimas para el clásico entre el Real Madrid-Barça, uno de los encuentros que más dinero mueve del mundo de deporte.

Nada inusual

Los últimos clásicos siempre han estado bajo la mirada de la policía para detectar la reventa de entradas y el fraude. El momento culminante fue en primavera de 2018 en un Barça-Real Madrid. El club, con la colaboración de los Mossos d’Esquadra, interceptó 2.823 entradas fraudulentas para el clásico del 6 de mayo.

Aledaños del Camp Nou en un partido del Barça / EFE

Aledaños del Camp Nou en un partido del Barça / EFE

En este caso no se trataba de entradas revendidas, sino que los abonados del club azulgrana cedieron sus datos a terceros para facilitar el fraude de entradas. La sanción fue ejemplar. 33 socios fueron expulsados, 491 sancionados 14 meses suspendidos de su condición de socio y otros 1.673, 18 meses de castigo.