PSG-Real Madrid. Posiblemente, una final adelantada de este nuevo Mundial de Clubes. El conjunto campeón de la Champions League frente al más laureado en el torneo continental. El que gane, accederá al partido que definirá al triunfador. Allí ya espera el Chelsea, vencedor de la Conference League, tras eliminar al Fluminense (0-2).
En la previa del mencionado encuentro, habló Luis Enrique en rueda de prensa. El asturiano jugó en el Sporting de Gijón, en el Real Madrid y en el FC Barcelona. Pese a su pasado como madridista, siempre se ha declarado culé. Posteriormente, ya como entrenador, tuvo dos etapas doradas en la entidad azulgrana. La primera, en el filial, entre 2008 y 2011. La segunda y más conocida, en el primer equipo, entre 2014 y 2017. Es el último técnico en alzar la Orejona con el Barça.
'Lucho' toma el micrófono
"Son dos situaciones totalmente diferentes, uno acaba de llegar y otro lleva dos temporadas [sobre Xabi Alonso y él]. Lo bonito del fútbol es que no sabe ni de favoritos ni nada. El fútbol sabe de 90 minutos en el que cada equipo debe mostrar sus cualidades, eso es lo que lo hace grande. Mañana se verá un gran partido", explicó Luis Enrique sobre el enfrentamiento que tendrá lugar este miércoles, a las 21:00 horas, en el MetLife Stadium.
De cara al duelo, no tuvo problema en admitir que enfrentarse a la entidad presidida por Florentino Pérez le atrae. "Es una gran motivación para mí como entrenador. Lo es por lo que representa el Real Madrid, como club a nivel mundial, porque todavía tengo personas dentro del club que conozco muy bien y con los que compartí vestuario. [...] Además, porque ya sabéis que yo soy culé, sigo siendo socio culé y sportinguista, así que siempre es motivante jugar contra el Real Madrid".
Luis Enrique y su hija Xana, en Berlín