
Aficionados del Barça en Milán para las 'semis' de Champions contra el Inter FCB
El Duomo y las galerías de Milán se tiñen de azulgrana: invasión de aficionados del Barça para la Champions
4.000 culés invadirán el Giuseppe Meazza y las calles de la ciudad italiana con la esperanza de ver una gran victoria del equipo de Hansi Flick
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6 de mayo. Esta es la fecha en la que se produjo el agónico Iniestazo en 2009, que terminó en triplete. También es el día en que Leo Messi tumbó a Jérôme Boateng en el Camp Nou en 2015, en otra temporada que acabó con los tres títulos. Este martes, también 6 de mayo, 4.000 culés invadirán Milán, con la esperanza de vivir otra noche mágica.
Desde buena hora de la mañana, la ciudad italiana empezó a teñirse de azulgrana. Culemanía, desplazada hasta la Lombardía, pudo comprobarlo. Los culés se desplazaron hasta el centro de la localidad. Invadieron la bonita plaza del Duomo, que acogió a todo hincha, incluida Aitana Bonmatí.

Aitana Bonmatí viaja a Milán para ver el Inter-Barça masculino REDES
La futbolista del Barça Femenino confía en la victoria del equipo masculino. Ya clasificada para la final de la Copa de Europa tras eliminar al Chelsea, la institución culé podría completar un doblete histórico y ganar las dos Champions, femenina y masculina, en una misma temporada. Bonmatí animará como una aficionada más.
Lujo culé
La marea azulgrana invadió la plaza del Duomo y también la Galería Vittorio Emanuele II, muy cercana a la catedral de Milán. Los pasillos, preciosos arquitectónicamente, llenos de tiendas lujosas, empezaron a estar abarrotados de culés que rompieron con toda tranquilidad y empezaron a entonar todo tipo de cánticos.
Los seguidores del Barça ondearon las bufandas y cantaron a los cuatro vientos el "lo, lo, lo, lo, lo, lo, lo, lo, lo, lo, Barça". Los nervios están a flor de piel. Tras una década, el equipo catalán puede llegar a una final europea de nuevo.
El Inter es un equipo muy fuerte en el Giuseppe Meazza. En Barcelona, los de Simone Inzaghi encontraron el punto débil del Barça en las jugadas a balón parado. Flick ha tomado nota y sabe que sus jugadores son capaces de ganar en Milán. Hoy, 6 de mayo, la historia puede volver a sonreír al Barça.