‘Laminemanía’ en Montjuïc: el espontáneo desubicado entre un mar de camisetas de Lamine Yamal

Miles de aficionados del FC Barcelona disfrutaron de la clasificación a los cuartos de final de la Champions League, vestidos con la camiseta de Lamine Yamal en el Estadi Olímpic de Montjuïc. El barcelonismo cayó rendido a los pies de la joya de Rocafonda, que correspondió las muestras de apoyo con una obra de arte en forma de gol. El delantero de 17 años acarició la pelota en el minuto 27 y su rosca terminó en el fondo de las mallas.

El golazo dio paso a la euforia colectiva en lo alto de la montaña mágica. Culemanía, presente para cubrir la gran cita, captó en Instagram a una decena de aficionados ataviados con la indumentaria azulgrana de esta temporada 2024-25, el número 19 y el nombre de Lamine Yamal en la espalda. Entre los hinchas entusiastas de la estrella salida de la Masía se encontraba un chico nostálgico con la camiseta de Neymar Jr. Hasta ahí, todo dentro de la normalidad entre las equipaciones escogidas para animar al Barça.

El mito Ronald de Boer

Sin embargo, un viajero del tiempo se coló en la grada, debajo de las tribunas de prensa, con una equipación curiosa, cuando menos. La cámara de Culemanía enfoca a un aficionado barcelonista desubicado, vestido con la primera equipación de la temporada 2015-16, el dorsal 18 y el nombre R. De Boer. Un anacronismo en toda regla, pero ni una bola de vidrio habría podido acertar el jugador protagonista.

Suena a regalo a modo de broma para el amigo invisible, puesto que la estancia de Ronald de Boer en el Camp Nou junto a su hermano gemelo Frank apenas se dilató dos años: desde enero del año 1999 hasta el mercado invernal de 2001. También cabe la posibilidad de que el seguidor en cuestión sea el mayor fan del atacante de Países Bajos. En dos temporadas, el delantero neerlandés levantó la Liga 1998-99.