El negocio inmobiliario de dos exjugadores del Celta en el centro de Vigo

Vigo está de moda. Ciudad gris hasta hace una década, es la capital de la luz, con el controvertido Abel Caballero como alcalde desde 2007. Cada Navidad, Vigo atrae a miles de turistas que contemplan la espectacular transformación de una urbe industrial que tenía un casco antiguo decadente hace dos décadas, azotado por las drogas. En la búsqueda de nuevos inversores, Cabellero sedujo a dos mitos del Celta: Michel Salgado y Valeri Karpin.

Salgado, futbolista que alcanzó fama y gloria con el Real Madrid, se consagró en el Celta. Nació en As Neves (Pontevedra) y fue uno de los ídolos de la afición celtiña a finales de los 90.

Michel Salgado, en un partido del Celta Redes

En verano de 1999, con Lorenzo Sanz como presidente, el Real Madrid pagó 2.000 millones de las antiguas pesetas por Salgado. Es decir, 12 millones de euros.

El Barrio do Cura

Valeri Karpin también forma parte de la historia del Celta, club en el que jugó entre 1997 y 2002. Era un futbolista ofensivo, con mucho talento, que contrastaba con la fuerza de Salgado.

Karpin, en un partido con el Celta

Salgado y Karpin, antagónicos pero complementarios en el campo y fuera de él, se comprometieron para invertir en la reforma del Barrio do Cura. Ambos se unieron al empresario José Crespo para convertir una zona muy degradada en otra muy atractiva para estudiantes y, actualmente, turistas ocasionales. Es una zona de 25.000 metros cuadrados.

Caballero, alcalde

Los dos futbolistas idearon la transformación del barrio en 2004, paralizada inicialmente por los tribunales y la crisis. Tres años después, Caballero accedió a la alcaldía de Vigo. Entre sus planes también pasaba la mejora del centro urbano y en 2018 juntó a Salgado, Karpin, el fondo de inversión Autonomy Capital y la promotora Gestilar.

Abel Caballero, alcalde de Vigo Redes

“El centro de Vigo estaba en muy malas condiciones, con mucha droga y casas en un estado deplorable. Daba miedo”, explica Hugo, un guía turístico de la ciudad. “Ahora es una ciudad muy atractiva para los turistas, pero también para los estudiantes y familias jóvenes. Caballero promovió alquileres más baratos para regenerar el barrio”, añade la misma fuente, seguidor también del Celta.