Riqui Puig ha ayudado, en las últimas horas, a que Los Angeles Galaxy se tome un respiro. Tras siete partidos sin conocer el triunfo, el conjunto angelino ha estrenado su casillero de victorias en la Major League Soccer (MLS) al doblegar al Austin por 2-0. Un resultado favorable que se ha fraguado gracias a la diana inicial del mexicano Chicharito Hernández, y a la posterior del exazulgrana Riqui Puig.
Primer gol del curso para Riqui
Chicharito, que se perdió los primeros cinco partidos del año por lesión, protagonizó su primer gol del curso aprovechando un pase de Dejan Joveljic. Riqui Puig, por su parte, se nutrió de un contragolpe, en un tres contra uno, para llegar en carrera por banda izquierda y definir a la perfección ante el portero rival.
Disparo colocado y a media altura, con el interior, para anular la salida del guardameta y certificar la victoria de Los Angeles Galaxy. Cabe recordar que el equipo californiano venía de perder en el derbi ante Los Angeles FC (LAFC), en un inicio pésimo del curso en el que aún no había conseguido ganar.
Ahora, este triunfo le sirve para tomar aire y tomarse los próximos encuentros con mayor confianza y optimismo. En cuanto a Riqui Puig, es un fijo en los planes del entrenador aunque se perderá el próximo partido frente a Orlando City por acumulación de tarjetas amarillas.
Riqui anda mosca con los árbitros
Pese a que no lleva ni un año completo en su actual equipo, Riqui se está convirtiendo en uno de los jugadores más importantes de la Major League Soccer, y es candidato a luchar por ser nombrado el MVP al final de la actual campaña. El centrocampista español transformó su primer gol en el Dignity Health Sports Park el pasado sábado, y lo celebró con una amplia sonrisa y el gesto del arquero.
Lo que no le está gustando desde que aterrizó en la MLS es el arbitraje. Acumula actualmente cuatro cartulinas en ocho partidos del presente curso, algo que llama la atención. “Mira, es algo que no me gustaría hablar porque es darle mucha importancia a una figura que tiene que pasar desapercibido. El árbitro tiene que hacer su trabajo y que no se hable de él”, remarcó Riqui Puig tras el encuentro en Austin. “A mí me dan patadas durante noventa minutos, a lo mejor el mismo jugador seis veces y no le sacan la amarilla”, se quejó. Veremos si sirve de algo.