El FC Barcelona se volverá a reencontrar con Quique Setién. El que fuera entrenador del conjunto azulgrana durante un tramo de la 2019-20 ahora se enfrentará a los culés como encargado del banquillo del Villarreal CF. Su intención es parar el buen momento de los dirigidos por Xavi Hernández, que quieren seguir en lo más alto de la tabla de clasificación de la Liga.
La estrategia de Setién
El submarino amarillo ha tenido buenos tramos con el técnico cántabro. Su comienzo de ciclo con el equipo no fue positivo, pero poco a poco ha ido aplicando su idea de juego, a tal punto que llegaron a encadenar algunos encuentros sin conocer la derrota, entre las que destacan el triunfo en casa contra el Real Madrid. Esa misma estrategia es la que se espera en el enfrentamiento ante el Barça.
Si bien Setién se ha caracterizado por ser un entrenador con una filosofía de juego posicional, la realidad es que ha ido mostrando cierta flexibilidad al momento de dirigir al Villarreal. Su equipo no rehúye del balón, porque las estadísticas de las posesiones son un claro ejemplo de ello. La cuestión es que ahora los ataques de su equipo son a una velocidad muy diferente, a tal punto que la fortaleza de su estrategia está en el ritmo en cada una de esas transiciones o jugadas.
Así lograron hacerle mucho daño al Madrid de Ancelotti, por lo que no es descartable que apliquen el mismo guión contra el FC Barcelona. El gran problema para Setién es que no podrá contar con Gerard Moreno, su futbolista más diferencial en ataque. El delantero confirmó en redes sociales que no podrá estar el partido por unas molestias en el gemelo: “Paramos unos días”, reflejaba la publicación en la que se ve una foto de su vendaje.
La muralla del Barça de Xavi
La buena noticia para Xavi Hernández, ante esa posible estrategia del Villarreal, es que cuenta con la fórmula perfecta para contrarrestar los veloces ataques de los atacantes rivales. La presencia de Araujo, Christensen, Koundé y Balde supone un salvavidas para el Barça en ese tipo de situaciones, teniendo en cuenta que tienen una gran capacidad para corregir a campo abierto.
La línea defensiva tendrá mucho trabajo de cara a ese compromiso. Los atacantes más peligrosos del submarino amarillo son Chukwueze, Pino, Baena y Morales. Perfiles que prefieren atacar a gran velocidad y con muchos metros a su favor.