El árbitro neerlandés Pol van Boekel regresará a la sala VAR para el Viktoria Plzen-Bayern de Múnich de la próxima jornada de Champions League. La polémica después de encadenar sendos errores arbitrales en los partidos del FC Barcelona contra el propio Bayern y el Inter de Milán no ha afectado a la presencia del controvertido trencilla en la próxima jornada. Van Boekel tiene próxima víctima.
El castigo para el colegiado responsable de la derrota del Barça en Milán tendrá que esperar. Y es que la UEFA nombra a los árbitros por dos jornadas. Por lo tanto, Van Boekel tenía asegurada su presencia en los encuentros de la tercera y la cuarta fechas de la Champions League.
Contra el Barça
Cabe permanecer a la expectativa aún respecto a la quinta jornada, cuando la UEFA puede enviar a la nevera al árbitro oriundo de Países Bajos. Hasta ahora, erróneas decisiones como responsable de videoarbitraje han tenido incidencia directa en las derrotas del FC Barcelona. Primero, frente al Bayern de Múnich, Van Boekel no llamó al árbitro de campo a revisar un penalti clamoroso de Alphonso Davies a Ousmane Dembelé. El lateral canadiense zancadilleó el futbolista francés en el pico del área.
Semanas más tarde, después del parón de selecciones, Van Boekel consumó su fracaso en esta edición de la Champions. En esta ocasión pasó por alto en el descuento un penalti manifiesto por manos de Denzel Dumfries dentro del área. El clamor generalizado en Can Barça a raíz de dicha acción decisiva, que privó al equipo azulgrana de un penalti para empatar, puso sobre la mesa la posibilidad de una queja formal a la UEFA.
Vincic también arbitrará
En cuanto al otro gran responsable de la derrota del Barça, el colegiado esloveno Slavko Vincic, arbitrará el Rangers-Liverpool del grupo A de la máxima competición europea. Es decir, los dos colegiados en el ojo del huracán tras el descalabro en Milán volverán a las andadas en la cuarta jornada, sin consecuencias.
Más allá del polémico penalti no pitado, también anuló un gol de Pedri por una manos previas de Ansu Fati, involuntarias y procedentes de un rebote. Para más inri, Sergio Busquets sufrió un duro plantillazo de Hakan Calhanoglu, amonestado con tarjeta amarilla. Sin embargo, la peligrosidad de la acción requería de una sanción mayor para el atacante turco, autor del gol del Inter.