El Barça llega al partido de Champions frente al Benfica con la imperiosa necesidad de ganar tras la dura derrota que sufrió en su estreno ante el Bayern. Los antecedentes entre ambos equipos dejan al Barça como vencedor con un bagaje favorable de tres victorias, tres empates y una derrota. La derrota culé, eso sí, todavía arde en la memoria de los aficionados azulgrana.
La final de los postes
Corría el año 1961 cuando los azulgrana se enfrentaron al Benfica en la final de la Copa de Europa. El Barça de Kubala, Cziborg y Luis Suarez llegaba como favorito a Berna ante los portugueses en su primera final europea. El Barcelona acabó perdiendo aquel partido por 3 a 2 de manera traumática llegando rematar hasta en cuatro ocasiones a los postes.
Camino hacia la gloria
En los siguientes enfrentamientos, encontrarse con el Benfica fue sinónimo de futuras grandes alegrías para los culés. En la temporada 1991-1992 el equipo entrenado por Johan Cruyff, se tuvo que enfrentar a los portugueses en la liguilla final de grupos previa a la gran final. Tras el empate a 0 en Portugal, los azulgrana vencieron por 2 a 1 en el Camp Nou con goles de Stoichkov y Bakero. El final de esa temporada acabó con el Barça levantando su primer Copa de Europa.
Benfica-Barça 2006
La siguiente vez que cruzaron caminos fue en los cuartos de final de la temporada 2005/2006 en el recorrido hacia la segunda Champions League del club y la primera y única de Rijkaard, Ronaldinho y compañía. El partido de ida acabó con 0 a 0 en el Estádio de Da Luz. La eliminatoria se sentenció en el Camp Nou con una victoria por 2 a 0 con tantos de Eto’o y Ronaldinho.
Amargo recuerdo
El último recuerdo que se tiene del Benfica no es precisamente bueno. Ambos se volvieron a ver las caras en la fase de grupos de la edición 2012-2013. En el Camp Nou el encuentro acabó con otro 0 a 0. Sin embargo, el Barça se alzó con la victoria en Lisboa con goles de Alexis Sánchez y Cesc Fábregas. El partido quedó marcado por una grave lesión de Puyol que acabó con una luxación de codo en una imagen muy desagradable del excapitán retrociéndose de dolor en el césped, algo muy poco común en él.
El club lisboeta ha dejado a lo largo de la historia imágenes de muy diferentes sabores en la afición culé. El equipo será el que decida si el miércoles, el Benfica, seguirá sumando momentos a la historia negra del club o, si por el contrario, se amontonará en la lista de buenos recuerdos.