Nasser Al-Khelaïfi está intranquilo. El jeque y dueño del Paris Sant Germain juega desde hace meses una partida de póker con su gran estrella (con permiso de Neymar Jr) y no sabe si la jugada le va salir bien esta vez.
Kylian Mbappé ya se entrena desde hace días con sus compañeros y su entrenador, Mauricio Pochettino, confirmó que el jugador estará disponible para el debut del equipo parisino en la Ligue 1, el próximo sábado.
Pero el mercado sigue abierto y en París no tienen nada claro cuál será el futuro del crack francés. La posibilidad de que salga con destino al Real Madrid, principal pretendiente del jugador, no está descartada.
Kylian Mbappé en un partido con el PSG, en una imagen de archivo / EFE
Kylian Mbappé en un partido con el PSG, en una imagen de archivo / EFE
No quiere renovar
Este lunes el diario galo Le Parisien informó que Mbappé ha decidido que esta será su última temporada en el PSG. El delantero, que acaba contrato en junio de 2022, no tiene pensado renovar con su actual club, a pesar de los esfuerzos y los millones puestos encima de la mesa por Al-Khelaïfi.
De esta manera, el riesgo de que el próximo curso el atacante salga gratis es una realidad. Un escenario al que en ningún caso los dueños del club parisino quieren llegar. Mbappé, de 22 años, es una de las joyas de su proyecto, pero también un jugador cuyo valor de mercado puede rondar los 160 millones de euros. Dejarlo marchar sin recibir un solo euro a cambio sería inconcebible.
¿Las armas del Real Madrid?
Con estos mimbres, en París temen un ofensiva en el cierre de mercado procedente de Madrid. El delantero habría dejado claro a los mandamases del club blanco que su intención es recalar en Chamartín.
Carlo Ancelotti junto a Florentino Pérez, en un entrenamiento de esta pretemporada / Real Madrid
Carlo Ancelotti junto a Florentino Pérez, en un entrenamiento de esta pretemporada / Real Madrid
Esta es la mejor arma de los dirigentes blancos, que además habrían trazado un plan para asegurar la viabilidad económica del traspaso, según informa As. Florentino Pérez tiene claro que el francés ha de ser el emblema merengue en los próximos años. Pero para ello es necesario que el PSG se siente a negociar, cosa que hasta ahora no ha hecho.