Nuevo culebrón en el PSG, no hay un verano tranquilo en el Parc des Princes. Parecía que esta ventana de fichajes, con Sergio Ramos como gran incorporación, no habría rumores de salida por Neymar Junior, recientemente renovado, y Kylian Mbappé. El interés del Real Madrid por este último sigue, pero no hay nada definitivo.
A una temporada de terminar contrato, parece que el delantero galo saldrá gratis en 2022 y decidirá cuál será su próximo destino. Por el otro lado, el coloso parisino sigue tensando la cuerda intentando que renueve su contrato y, si sale, que sea a cambio de un traspaso cuantioso.
Mbappé entrenando con el PSG / PSG
Cuando en Madrid se reavivaban los rumores de su salida, el PSG respondió este miércoles de manera indirecta a través de su revista, PSG Magazine, con una entrevista hecha al futbolista: “Mi gran sueño es el de poder ganar la Champions League con el PSG, sería algo fantástico”. La campaña de presión mediática en torno a Mbappé se acentúa.
Molesto por los ‘timings’
Según publica este viernes L’Équipe, el jugador está molesto a considerar que el momento de publicación de esta entrevista no ha sido el correcto. Esta se grabó en mayo y no ha sido publicada hasta los últimos días. Desde el entorno del jugador lo consideran como una estrategia de seguir presionando para que renueve.
El jugador y sus próximos consideran que lo lógico hubiera sido publicar estas palabras en junio y no ahora. Estas han salido cuando ya ha tomado la decisión de no renovar y que se pueden sacar de contexto. La realidad y el deseo de la entidad francesa son totalmente diferentes.
Mbappé con la selección francesa / Équipe de France
La realidad es que Mbappé tiene serias dudas sobre el futuro del proyecto del PSG. Muchos millones invertidos, pero no ve una salida clara. Por ese motivo, de momento ha rechazado todas las propuestas de renovación que le han puesto sobre la mesa. Esperará un año y no seguirá.
Las informaciones también apuntan que en los despachos ya han tirado la toalla. El director deportivo, Leonardo, ha abandonado las negociaciones. No hay sintonía y considera que para desatascar la situación las riendas de estas las tiene que coger el presidente, Nasser Al-Khelaifi. Empieza un curso que se avecina movido.