Exjugadores del FC Barcelona querían convencer a Diego Armando Maradona para que se recuperara en Barcelona. Varios exazulgranas lo convencieron el año pasado para que volviera a la capital catalana. Julio Alberto, Marcos, Bernd Schuster, Caniggia, Migueli y Richy Castellanos le convencieron para que se recuperara en la localidad barcelonesa, según explica El Periódico.
Pero no llegaron a tiempo. El coronavirus complicó la situación y Maradona tuvo que quedarse en Argentina. En un entorno nocivo, sin tranquilidad, la leyenda albiceleste necesitaba reposar emocionalmente, además de curarse la rodilla y la cadera. La mudanza, que debía realizarse después de esta Navidad. “Le hacía ilusión, pero también tenía miedo de salir de Argentina”, ha explicado Julio Alberto.
Richy Castellanos y Maradona / REDES
Pero el ingreso hospitalario de Diego desde que se le detectó un coágulo en su cabeza y la posterior operación, frustraron su salida de Argentina. Su fiel amigo por más de 25 años, Richy Castellanos fue el último de todos los exazulgranas en hablar con Maradona, el día de su 60 cumpleaños: “Le dije aquel día: ‘quiero que vengas conmigo a Madrid y de allí nos vamos a Barcelona a la clínica’. Me contestó que después de diciembre, cuando terminara el contrato de entrenador con Gimnasia y Esgrima La Plata, vendría”.
Dar un giro a su vida
“Vivíamos con la expectativa de que hiciera un cambio radical, más sano, gustarse a sí mismo, poder andar. Que volviera a ser el que conocimos. Creo que habíamos hecho un buen plan», dijo Julio Alberto. «Sabíamos del problema de la Covid-19, habíamos hecho un estudio de los días que podíamos estar en Argentina para ir a buscarlo y traerlo y que no viniera solo. Habíamos estudiado una serie de cosas que han quedado en nada”, ha explicado Castellanos.
“Barcelona tiene algo que tienen muy pocos otros sitios: un entorno favorable, médicos extraordinarios, dos o tres clínicas que son punteras. La idea era que no estuviera solo y tuviera alguien de compañía. Queríamos ver a Diego recuperado físicamente y después aprovechar para la recuperación emocional y la autoestima que uno tiene que tener para seguir viviendo. Hay que renunciar a cosas, poner ciertas barreras y saber con qué amistades juntarse y con cuáles no”, argumenta Richy Castellanos.
Maradona y Richy Castellanos eran amigos por 25 años / REDES
El estado de salud Maradona se había deteriorizado mucho tras la operación en su cabeza. Su médico personal, Leopoldo Luque, dijo que estaba “increíble” después de salir del quirófano. Pero, Alfredo Cahe, el histórico médico de cabecera de Maradona, fue crítico: “No se lo cuidó como correspondía». A criterio de Cahe, Diego tenía que haber permanecido en la clínica. Además, su abogado Matías Morla hizo pública su denuncia por la media hora de tardanza de la ambulancia en aparecer en casa del mito. Maradona arrastra la controversia hasta el final de sus días.