Uno de los grandes objetivos de club de cara a la próxima temporada es el ascenso del Barça B a Segunda División A. Una meta que a la que dan mucha importancia en los despachos del Camp Nou por la posibilidad de que los jugadores del filial puedan ayudar de forma más frecuente al primer equipo sin que las diferencias sean tan elevadas.
El ascenso sería un logro estratégico en clave de club. Especialmente se veía así hace unas semanas, cuando no estaba nada claro lo que se iba a hacer con Ansu Fati y Riqui Puig. Sin embargo, tras sus recientes actuaciones en el primer equipo, parece obvio que ambos futbolistas se han ganado el derecho a tener ficha con Messi y compañía.
Hace unos meses, la estrategia pasaba por lograr el ascenso y hacer a ambos ficha del Barça B, aunque entrenasen en dinámica de primer equipo. Y, en caso de no lograr el ascenso, se barajaba incluso la posibilidad de que saliesen cedidos, porque no podían estar en Segunda B pero tampoco reinaba el convencimiento de que estuviesen listos para ser fijos en el primer equipo.
Objetivo Champions + ficha de primer equipo
Ahora, la situación es diferente. Ansu y Riqui han hecho méritos de sobras para asentarse con los mayores. Otra cosa es que vayan a tener la titularidad asegurada, cosa que será muy difícil y tendrán que pelearlo con paciencia. Pero de puertas para adentro, cada vez está más claro que se codearán con los Messi, Suárez, Piqué o Busquets.
Ese es uno de los motivos por los que se habría tomado la decisión, todavía no oficial, de que ni Ansu ni Riqui participen en el Playoff de ascenso del Barça B. El otro motivo, todavía más importante, es que están llamados a ser vitales en la lucha por la Champions League. Fuentes del club informan a Culemanía que solo notificarán a los medios en caso de que finalmente alguno de los jugadores baje a ayudar al filial, cosa que se antoja muy poco probable en estos momentos y que, en cambio, sí ha sucedido con Araujo, que se va este martes a Marbella.
Quique Setién cuenta con ellos para pelear la orejona y les reserva un rol protagonista teniendo en consideración la falta de efectivos en el primer equipo. Hay que tener en cuenta que la plantilla es corta, el cansancio pasa factura y la enfermería todavía tiene a varios lesionados.
18 fichas del primer equipo para la Champions
La línea más completa en estos momentos es la portería, con Ter Stegen, Neto, Iñaki Peña e, incluso, el juvenil Arnau Tenas rondando.
En defensa, el club contará con Semedo y Sergi Roberto para el lateral derecho, Piqué, Lenglet, Araujo y un Umtiti que sigue lesionado, y Jordi Alba y Junior Firpo para el lateral izquierdo. Todibo, cuyo futuro está abierto de cara al próximo curso, no puede jugar la Champions, como tampoco Wagué.
Ronald Araujo, en un encuentro con el Barça | FCB
En el centro del campo, situación similar: Busquets, De Jong, Rakitic, Arturo Vidal son los fijos más el canterano Riqui Puig, el polivalente Sergi Roberto y un Arthur Melo que ya no cuenta para el técnico desde que se cerró su traspaso a la Juventus. Se le pidió profesional pero no se le ha dado la oportunidad de demostrarla.
22 futbolistas disponibles (si no hay lesiones)
Mientras que en la delantera, Setién cuenta con Messi y Luis Suárez como fijos. Griezmann y Dembelé están lesionados, aunque se espera que ambos puedan llegar, especialmente el primero. Ansu Fati está llamado a ser el revulsivo, ya que Braithwaite no está inscrito en la Champions y no contará para el entrenador. Su futuro también está en el aire.
Estamos hablando de tan solo 18 fichas del primer equipo, tres correspondientes a jugadores ahora lesionados y otra a un jugador ya traspasado. A esos 18 se suman los ya citados Iñaki Peña, Araujo, Riqui y Ansu. 22 futbolistas, tan solo 19 jugadores de campo. Es por este motivo que Setién no quiere ni oír hablar de la posibilidad que los tres canteranos se jueguen el físico en el Playoff de ascenso del filial. Y por lo que parece, así será.