Mirotic rescata al Barça en una remontada épica

Nikola Mirotic ha vuelto a demostrar una vez más que es uno de los jugadores más decisivos a nivel europeo. Con 2+1 del montenegrino en los últimos segundos, el Barça culminó una remontada épica ante el Valencia Basket (76-77) y consiguió su cuarta victoria seguida en Euroliga, que acerca al equipo de Pesic a las posiciones delanteras de la clasificación. 

El conjunto culé volvió a demostrar que si de algo le sobra este curso, es de calidad técnica y de garra. Pese a ir cayendo durante tres cuartos, y mostrando una poca eficacia en su juego, los azulgranas fueron capaces de despertar en el momento más decisivo. 

Remontan una desventaja de 16 puntos

Los primeros 30 minutos del conjunto culé fueron caóticos. Sin intensidad defensiva y con poca consistencia en ataque, el Barça fue a remolque del Valencia durante los tres primeros cuartos. Ni siquiera las broncas de Pesic hicieron efecto en unos jugadores desmotivados y que vieron como los valencianos les hacían mucho daño con ataques poco elaborados. 

Mirotic, atacando a la defensa del Valencia Basket | FCB

Mirotic, atacando a la defensa del Valencia Basket | FCB

Bajo esta premisa, los taronjas llegaron a acumular incluso una ventaja máxima de 16 puntos en el tercer cuarto. No obstante, en un mal partido a nivel general, el Barça volvió a demostrar su coraje de equipo campeón. Y la actitud que no mostraron en los primeros tres cuartos la pusieron de manifiesto por completo en el último. Canasta a canasta, defensa a defensa, el conjunto culé consiguió igualar el marcador a pocos minutos del final. 

Y en un final de infarto, finalmente se llevó el duelo el equipo que más creyó. Y ese fue el Barça, que de la mano de un inspirado Mirotic, cerró la victoria tras un mágico 2+1. Triunfo importante de un Barça muy inconsistente, que consigue acercarse a los puestos delanteros de la Euroliga. No obstante, pese a la victoria, Pesic todavía tiene muchas cosas a mejorar en un equipo con mucha calidad, pero que debe dejar de correr riesgos y de jugar con fuego, porque algún día puede acabar quemándose.