Este martes vimos en el Real Madrid-PSG uno de los escándalos más grandes del VAR en Europa. A finales de la primera parte, minuto 42, un pase de Ángel di María dejaba solo a Mauro Icardi en un mano a mano contra Thibaut Courtois. El belga llegaba tarde al cruce y derribaba al delantero dentro del área.
El colegiado Artur Dias pitó, pero no señaló si era penalti o falta. Esperaba que desde la sala VAR le comentaran donde se había producido la infracción. En un principio indició los once metros y le sacó roja al portero blanco. Posteriormente, fue a consultar las imágenes él mismo.
El momento en el que el árbitro decidió seguir las indicaciones del VAR | EFE
El momento en el que el árbitro decidió seguir las indicaciones del VAR | EFE
Después de ver las repeticiones cambió radicalmente de opinión. Anuló el penalti y la tarjeta y señaló una falta previa de Gueye a Marcelo en el centro del campo, una acción que el mismo árbitro dejó seguir al entender que no había falta. Ni los jugadores -ni los aficionados- se creían lo que veían.
El comentario de Cesc Fàbregas
Cesc Fàbregas, actual jugador del Mónaco, estuvo viendo atentamente el partido del martes siguiendo el PSG en el Santiago Bernabéu. Al ver las decisiones arbitrales explotó y comentó vía redes sociales lo que le parecían las actuaciones de Artur Dias.
“Olvidemos colores por un segundo. ¿Cómo puede pitar falta por ese leve toque? Puedo llegar a entenderlo si lo pita a la primera... Pero ir a verlo a una tele y pensar que sigue siendo falta... Dónde no hay, no hay”, comentó el ex del Barça en Twitter tras el penalti de Thibaut a Icardi.
Luego añadió que “lo mismo en la roja para Thibaut Courtois, amarilla máximo. Madre mía...” y que “está siendo un gran partido con un Madrid que hacía mucho tiempo que no veía pero hablo de los árbitros en general, el nivel es muy... Pon tú lo que quieras...”.
Elogios a Kroos y a Benzema
Cesc Fàbregas aplaudió la actuación de Toni Kroos y de Karim Benzema, autor de los dos goles blancos. Destacó el partido del conjunto madrileño con un “me encanta el buen fútbol. Partidazo del Madrid”. El catalán es una de las figuras de los rivales más potentes del PSG, el Mónaco.