Las sagas FIFA, de la empresa EA Sports, y Pro Evolution Soccer (PES), de la marca Konami (patrocinador del FC Barcelona), se disputan el reinado de los videojuegos de fútbol desde hace más de dos décadas. En todas y cada una de las plataformas que han aparecido desde 1997, canadienses y japoneses han competido ferozmente por ser el juego más vendido.
FIFA empezó dominando, pero a principios del siglo actual, gracias a su mayor jugabilidad y su modo multijugador, PES dio un paso hacia adelante y avanzó a la saga de Electronic Arts. En 2005 y 2006, gracias a PES 5 y PES 6, Konami pasó por delante de la marca canadiense. La empresa japonesa era la reina de Play Station 2.
La transición hasta la Play Station 3 favoreció a FIFA. A partir de 2008, no hay quien tosa a la marca canadiense. Las licencias de las grandes ligas, así como un juego más competitivo y con más modos de juego, ha llevado el trono de los videojuegos de fútbol hasta Vancouver. Actualmente, la distancia entre ambos parece insalvable, al menos a corto plazo.
La evolución de Messi
En toda esta batalla entre Konami y Electronic Arts, uno de los protagonistas, aunque de forma involuntaria, ha sido Lionel Messi. Seas de FIFA o de PES, el argentino ha sido durante los últimos 12 años una pieza imprescindible para ganar los partidos. Uno de los futbolistas mejor valorados, con gran tiro, pase y regate. En definitiva, con todo lo que se necesita para ser diferencial en un videojuego.
En los videojuegos, así como en la realidad, Messi también ha evolucionado, sobretodo a nivel de gráficos. Su apariencia actual en FIFA 19 y PES 2019 nada tiene que ver con la de FIFA 06 y PES 5, primeros videojuegos donde apareció. De hecho, por aquel entonces, lucía una cara por defecto y las sagas ni siquiera se ponían de acuerdo en el color de su cabello. En FIFA era moreno y en PES, rubio. Además, en FIFA presentaba unos ratings totales de 78 y en PES presentaba unas estadísticas muy pobres y descompensadas.
Al año siguiente, en FIFA 07 y PES 6, el crecimiento del 10 se plasmó también en los videojuegos. En FIFA ya contaba con 84 de valoración y pese a que su cara distaba mucho de la real, se intuía que podía ser él. En el juego de Konami seguía teniendo una cara por defecto, pero sus estadísticas ya eran mucho mejores. Dos años después, en PES 8, sí que consideraron que Messi merecía su cara real, mejor diseñada que la de FIFA.
Cuestión de gustos
Con el paso de los años, mientras se convertía en el mejor del planeta y probablemente el mejor de la historia, también era uno de los mejores en los videojuegos. Su cara en los videojuegos de PES era prácticamente era idéntica, mientras que en FIFA había que echarle imaginación para saber que era él (09-10-11). Es algo que ha sucedido históricamente: FIFA tiene las licencias, mejor jugabilidad y mayor competitividad y PES, mejores gráficos.
La evolución de Leo Messi en FIFA / YOUTUBE
Así ha sido también a lo largo de la última década. Messi no solo tenía mejor cara en el juego de Konami, sino que también era mejor valorado. En PES llegó a alcanzar los 98 de valoración durante cuatro videojuegos consecutivos (2012-2015) mientras que en FIFA jamás superó los 95, aunque casi siempre fue el que ostentaba mayor rating (junto con Cristiano Ronaldo, imagen de la empresa hasta 2019).
Se podría decir que Messi ha sido mejor tratado por Konami que por Electronic Arts, pero donde lo ha disfrutado más gente ha sido jugando al FIFA.